Buenos modales y cultura en el refranero español

Cuando estamos en una conversación, lo más prudente y educado es no entrar en la materia si no sabemos nada sobre esa cuestión

 

Cultura y buenos modales. Joven leyendo un libro. Conocimientos, cultura y buena educación. Saber hablar y de lo que se habla foto base nactive account – ID 455992 - Pixabay

Conocimientos, cultura y buena educación. Saber hablar y de lo que se habla

No hay nada tan atrevido como la ignorancia.

Cuando estamos en una conversación, lo más prudente y educado es no entrar en la materia si desconocemos todo sobre la misma. No hay que hacer ver que sabemos de todo. Fácilmente caeremos en el error de aparentar algo que no somos o que no sabemos de lo que se habla.

Mucho enseña quien bien pregunta.

Al igual que decíamos "donde fueres haz lo que vieres". Cuando tenemos alguna duda lo mejor es preguntar. No tiene porqué avergonzarnos. Dice otro refrán que: "Tonto no es el que no sabe, sino el que no pregunta". Siempre que dudemos es mejor preguntar, es la forma de aprender.

Disculpa quieren las cosas.

Cualquier error o comportamiento indebido, siempre requieren una disculpa. Las buenas maneras exigen demostrar la buena educación por medio de una disculpa.

La palabra y la piedra suelta no tienen vuelta.

Debemos pensar bien lo que decimos antes de expresarlo. Podemos herir o molestar con lo que decimos y como indica el refrán eso ya no tiene vuelta. También significa prudencia antes de hacer cualquier cosa. Hay un dicho similar que viene a significar lo mismo "hay tres cosas que no se pueden corregir o enmendar: la flecha lanzada, la oportunidad perdida y la palabra pronunciada".

Obras son amores, que no buenas razones.

Son los hechos, los que nos dan la verdadera esencia de las personas y no las palabras. No basta con parecer educado, sino que hay que serlo y demostrarlo. También nos puede valer esta máxima que utilizan muchos 'coach' o entrenadores: "más vale un gramo de acción que un kilo de intención".

Nadie nace enseñado, si no es a llorar.

Todos debemos aprender a comportarnos bien. Como bien dice el refrán nadie nace enseñado. Todos aprendemos un montón de cosas a lo largo de la vida, y la buena educación es una de ellas.

A tal Señor, tal honor.

Indica que según el rango de una persona así debe ser tratada y honrada, con independencia de lo que uno piense de ella. Ahí es donde se demuestra nuestra educación. Dejar a un lado posible rivalidades o diferencias y comportarse de forma educada ante los demás.

Palabras de cortesía, suenan bien y no obligan.

Hay que ser amable aunque no se esté de acuerdo con ciertas opiniones. Se puede ser cortés sin comprometerse a nada.

A veces logra una flor lo que un diamante no.

Los regalos, no siempre causan efecto por el valor del mismo, sino por la sencillez y el detalle que se tiene en un determinado momento. Recordar una fecha señala, agradecer un favor... es tan importante o más que hacer un regalo.

Donde no hubo despedida, no hay bienvenida.

Cuando uno se va de un sitio sin despedirse, no suele ser bien recibido en su próxima visita o aparición. Alguien que 'no se ha ido' no puede tener una bienvenida.

El hombre demasiado cortés, falso es.

Aquellas personas demasiado amables, de exagerados modales, suelen ser hipócritas que solo se mueven por un interés determinado. También se interpreta como la persona que es muy cortés con alguien que le cae mal.

El hombre bien nacido, no niega saludos ni a sus enemigos.

Las buenas maneras no deben perderse ni con las personas que no tenemos una buena relación. Los buenos modales deben estar por encima de rencillas o rivalidades personales.

Menos mantel y más comer.

Hace referencias a las personas que extreman o cuidan en exceso la reglas de etiqueta y de protocolo, pero se quedan 'cortas' en otras facetas personales.