¿Se lleva dar la propina al acomodador o al servicio de ropero? Las propinas y los espectáculos

La figura del acomodador y el servicio de guardarropa apenas se ven ya nada más que en algunos teatros y recintos para espectáculos

 

Dar propina espectáculos. Dar unas monedas de propina protocolo.org - FP Pro

Si en el teatro o recinto del espectáculo hay un servicio de guardarropa, hay un acomodador, etc. ¿aún es apropiado darles una propina?

La propina es una pequeña cantidad de dinero que se da de forma voluntaria como muestra de agradecimiento por un servicio eventual. ¿Es correcto ofrecer esta gratificación monetaria?

Si vamos a un teatro, cine o espectáculo en el que hay un servicio de acomodador o de guardarropa, entre otros, si es correcto dar una propina a la persona que nos presta ese servicio.

Debemos tener en cuenta, que cuando el servicio tiene 'una segunda parte', la propina se ofrece al final. Es decir, al acomodador le damos la propina cuando nos muestra nuestro asiento. Pero en el caso del guardarropa, no se da la propina en el momento de dejar nuestras pertenencias, sino en el momento de recogerlas.

No todos los profesionales que nos atienden deben recibir una propina. Por ejemplo, la persona que nos despacha las entradas o boletos, no recibe propina. Salvo que sea una costumbre en su país o región.

¿Cuánto hay que dejar de propina?

Es la pregunta del millón. Como es un gesto voluntario, queda al buen criterio de cada persona.

Pero debemos tener en cuenta una cosa: ni una cantidad que sea ridícula, e incluso ofensiva -dejar es monedas sueltas que no tienen ningún valor-; ni dejar una cantidad ostentosa que no es de recibo, que solo quiere ser una demostración de poderío económico. Todo en su justa medida, que es lo más correcto. 

Resumiendo, como hemos indicado en el artículo sobre las propinas , premiar o recompensar un servicio bien prestado con una propina es un gesto de cortesía y agradecimiento hacia la persona que nos lo presta. Aunque sea su obligación y su trabajo, siempre es un aliciente recibir una pequeña recompensa por un trabajo bien hecho.