Los gestos comunicación no verbal. ¿Comunican más que las palabras? (con vídeo)

Los gestos siempre hay que interpretarlos según el contexto y las circunstancias. Hay que saber relativizarlos para evitar malas interpretaciones

 

Ser buen comunicador. El lenguaje no verbal y el significado de los gestos que hacemos al hablar. Las claves para ser un buen comunicador foto base StockSnap - Pixabay

El lenguaje no verbal y el significado de los gestos que hacemos al hablar

Las claves para ser un buen comunicador

Mejorar nuestras dotes comunicativas es una de las 'asignaturas' pendientes de muchas personas, tanto en el campo personal como el ámbito profesional. Los gestos comunican y 'dicen' mucho más que nuestras palabras.

Los gestos son la vestimenta emocional con la que rodeamos el lenguaje. Cuando nos relacionamos con otras personas los gestos cobran una gran importancia porque se convierten en un 'elemento de valor' para evaluar a una persona. Nos solemos fijar en cómo mira una persona, cómo saluda, cómo camina, cómo gesticula, etcétera. Después de esta primera apreciación entra en juego el mensaje y las palabras. Pero son los gestos los que proyectan, refuerzan y multiplican, en muchos casos, la fuerza de ese mensaje.

Cuidar los gestos sin obsesionarse

No podemos estarnos 'analizando' las 24 horas del día. No podemos estar pendientes a cada momento del gesto que tenemos que hacer, de qué van a pensar o a interpretar los demás, etcétera, etcétera. Perdemos la atención en lo que realmente importa, que es lo que nosotros queremos transmitir. Comunicamos conjuntamente con nuestras palabras y nuestros gestos, pero no debemos pensar si lo estamos haciendo bien o mal; lo estamos haciendo como sabemos, sin obsesionarnos con la perfección.

"Para los obsesos de la detección... el manicomio es su destino"

Los gestos siempre hay que interpretarlos según el contexto y las circunstancias. Hay que saber relativizarlos para evitar malas interpretaciones. Fran, pone un ejemplo muy claro. Cuando nos comunicamos con alguien y esta persona se rasca la nariz, la interpretación suele ser que está mintiendo, que nos está contando una mentira. Pero, simplemente ¿no le puede picar la nariz? Por eso una cosa es lo que se piensa y otra la realidad, porque aunque un gesto dice mucho más que una palabra, también puede ser malinterpretado.

A comunicar también se aprende

Culturas como la norteamericana enseñan a comunicarse bien desde niños. En los colegios se enseña a comunicar, a debatir, a opinar y a razonar. Es lo que conoce como el 'public speaking'. Por eso, a comunicar se puede aprender siempre que los programas educativos lo contemplen y lo pongan en práctica.

¿Se puede llegar a ser un buen comunicador? Por supuesto, que sí. Decía el filósofo norteamericano Ralph Waldo Emerson que "todo buen orador empezó siendo un mal orador". Hay personas que tienen de base un mayor potencial por su capacidad de expresión tanto oral como gestual. Pero todo el mundo puede mejorar sus habilidades de comunicación.

Los 4 puntos básicos para ser un buen comunicador

1. Leer mucho. Leer cuestiones de oratoria, retórica, de comunicación no verbal y de temáticas similares.

2. Escribir. La escritura nos ayuda mejorar nuestra capacidad coordinativa, a estructurar mejor nuestras ideas y nuestros pensamientos.

3. Hablar. Siempre que sea posible establecer una buena conversación, porque mejora nuestra capacidad de comunicación.

4. Analizar. Analizarnos a nosotros mismos y a otros oradores. No nos suele gustar mucho escuchar a otros oradores de una empresa de la competencia y de un partido político opuesto al nuestro. Es un error. Siempre podemos aprender, si analizamos cómo comunican los demás.

El experto en comunicación y consultor en habilidades comunicativas Fran Carrillo, nos expone de una forma muy amena la importancia del lenguaje no verbal y de los gestos en nuestra esfera profesional y en el ámbito personal. El fabuloso programa divulgativo de RTVE "La aventura del saber" nos ofrece este estupendo espacio para conocer más a fondo el significado de los gestos y lenguaje no verbal.