Vestuario ideal para ir de crucero. Indumentaria a bordo

Las prendas de nuestra maleta varían en función del crucero que vayamos a realizar

 

 

Vestir para un crucero. Cómo vestir apropiadamente para ir de crucero. Vacaciones de crucero Goodfreephotos_com - Pixabay

Cómo vestir para un crucero. ¿Elegante o informal?

Cuando vamos de crucero en una de las cosas que primero pensamos, como hacemos para cualquier otro viaje, es en la ropa que vamos a necesitar para la travesía. Hay mucha literatura sobre el tema y muchas películas que distorsionan la realidad.

Las prendas que vamos a meter en nuestra maleta varían en función del tipo de crucero que vayamos a realizar. No es lo mismo hacer un crucero por el Caribe que hacerlo por los fiordos Noruegos -aunque dentro del barco nos dará igual-.

Hay que tener en cuenta que los grandes cruceros son ciudades flotantes, con sus comercios, restaurantes, casino, teatro o auditorio, etcétera. Por lo que el vestuario no debe ser muy diferente del que utilizamos en nuestra vida diaria.

Vestuario para ir de crucero. Vacaciones en un crucero. Qué ropa poner en la maleta Mariamichelle - PIxabay

Vestuario para un día normal a bordo

Como vestuario de diario debemos pensar en ropa cómoda y evitar la "rigidez" que, a menudo, nos somete el entorno laboral y social. Las mujeres pueden olvidarse de los tacones altos y los señores de los trajes. No nos hace falta nada más que algún conjunto que hagamos con estras prendas básicas:

- Pantalón o falda

- Camisa o blusa

- Zapatos planos o de tacón bajo

- Otras prendas: como un jersey, una cazadora, una chaqueta, etc. pueden ser necesarias para salir a cubierta o pasear al aire libre

Los complementos que queramos lucir deben ir acordes al vestuario elegido. No hace falta recargar el "look" para ir de paseo o tomar un aperitivo al bar.

Si nos vamos a la piscina, parque acuático o a practicar algún deporte, podemos vestir mucho más informal: "look" deportivo o solo toalla, playeras o tenis y bañador.

Vestuario formal para un crucero. Vestir para el día a día en un crucero. Ropa formal aaandrea - Pixabay

Vestuario de etiqueta: cena de gala u ocasiones especiales

Aunque la mayoría de los días vamos a vestir muy "de diario", también tendremos tiempo para lucir las mejores galas, y aprovechar la ocasión para "presumir" de un buen vestido, de alguna que otra joya y de un estupendo peinado, tantos las mujeres como los hombres.

Cuando se exige etiqueta el vestuario es muy sencillo:

- Hombres de esmoquin - smoking

- Mujeres de vestido largo o traje de noche

Tres situaciones, tres vestuarios

El vestuario a elegir va a depender de cada momento que será el que marque la pauta del comportamiento a seguir, en cuanto a las prendas de vestir se refiere.

1. Ocasiones informales: Es la indumentaria que se viste durante el día cuando paseamos por la cubierta del barco, cuando se visita la zona de piscinas, cuando se contempla el paisaje recostado en una tumbona o se lee un libro, etcétera. Podemos decir que es el vestuario de paseo.

2. Ocasiones formales: Son aquellos momentos (generalmente, por la tarde-noche), en los que nos vamos a tomar una copa, a ver un espectáculo en el teatro del barco o en otra sala, cuando vamos al casino a jugar y para cualquier otra actividad lúdica similar.

3. Ocasiones especiales: El evento por excelencia es la cena de gala, en la que luciremos nuestro mejor vestuario -por regla general, vestuario de etiqueta- y nuestras mejores joyas. Estas ocasiones se pueden llamar también, ocasiones de etiqueta. Son ocasiones especiales en las que se requiere de un vestuario elegante (vestir de etiqueta).

Vestuario crucero, ocasiones especiales. vestir de etiqueta en un crucero Pexels - Pixabay

Celebraciones especiales, vestuarios elegantes

Puede darse el caso de tener que acudir a cenas o celebraciones especiales por algún motivo en concreto: un homenaje, colaborar o ayudar a una organización benéfica, etc. aunque lo más habitual sea la cena de gala habitual en estos cruceros.

Fiesta de disfraces

No hemos hablado de la "etiqueta" del disfraz. Es bastante habitual, en muchos cruceros, celebrar un día -o más de uno- una fiesta de disfraces. Pero tampoco debemos preocuparnos por ello, porque, generalmente, los propios organizadores suelen contar con algún que otro disfraz que nos pueden dejar (o alquilar), si no hemos contado con ello a la hora de hacer nuestro equipajes. También lo podremos comprar en alguno de los comercios del barco.

Vestuario ocasiones especiales Crucero. Viajar en un crucero. Vestuario formal e informal Ronile - PIxabay

¿Cuántas cenas de gala hay en un crucero?

No hay número determinado pero si algunas costumbres bastante generalizadas. En los cruceros entre 3 y 7 días suele haber una cena-baile de gala. En los de 7 a 15 días, suele haber dos noches de gala. No obstante cada barco tiene sus propias reglas al respecto.

¿Siempre de etiqueta?

No siempre es necesario. Si el crucero es de lujo, los caballeros no deben olvidar su esmoquin y las señoras su vestido de noche. En cruceros más modestos, un traje de cóctel para ellas y un traje oscuro de corte clásico para ellos, puede resultar suficientes para las ocasiones más formales, aunque la mayoría se decantan por el vestuario de etiqueta.

No hay ningún tipo de asistencia obligatoria en el barco. Si usted no desea acudir a ningún tipo de cita formal o cena de gala, siempre tendrá otras opciones para cenar en otros restaurantes o dependencias del barco. La diversión la elije cada cual. Si hay que tener en cuenta que dependiendo de la estancia a la que quiera acudir del barco, pueden tener ciertas normas de etiqueta que deberá cumplir. Por ello no se extrañe si no le permiten entrar al Casino, por ejemplo, en vaqueros (jeans).

Si quiere cambiarse al llegar al barco debe recordar que su equipaje no será llevado hasta su camarote (habitación) hasta dos o tres horas después de haber embarcado. No se olvide de dar una propina al botones o mozo de maletas, de al menos un dólar (o euro) por bulto. En muchas líneas de crucero se especifica en el folleto de instrucciones el importe de las propinas que debe dar a cada empleado del barco con el que tenga alguna relación profesional.