Amigos del foro: Me gustaría defender el modelo británico de precedencias del Estado con respecto al español. Como bien sabéis, el presidente del Gobierno español ocupa un lugar muy destacado en el listado de precedencias del Estado, exactamente el puesto tras los Reyes, Príncipe de Asturias e Infantes de España. A partir de ese puesto comienzan a desfilar las más altas autoridades del Estado. El Modelo inglés, que da una importancia extraordinaria a la Familia Real es por un lado excesivo en cuanto a las personas de Sangre Real que preceden al Primer Ministro, además de Arzobispos, Duques y demás títulos de la más alta nobleza que también le preceden. Esto hace que el Premier ocupe el puesto veinte en este listado de precedencias; sin duda excesivo. Pero lo que me gustaría resaltar es la parte positiva de este asunto:al desplazar tantos lugares a los políticos se consigue que éstos no se sobrevaloren y se resignen a un puesto que sólo les corresponde temporalmente, en cuanto que desempeñan un cargo.En los actos oficiales, no ocupan lugares destacados, en cierta manera se les "humilla" por su condición. Ya sé que esto pertenece a la enorme tradición monárquica británica pero ahí dejo esa reflexión. ¿No os parece que los políticos de algunos países tienden a endiosarse cuando ocupan lugares destacados en la política?.¿No sería bueno para ellos que tomasen la medicina que se aplica en las precedencias británicas?