Te entiendo perfecto. En una ocasión me sucedió algo parecido y lo que hice (después de varios desatinos), es que, en un ambiente neutral (la nevería por ejemplo) le dije que me sentia incómoda porque yo tengo unas reglas y él otras, y que, si le parecía, mientras estuviera en casa, para no ofendernos mutuamente, haríamos una reglas temporales.
Funcionó y se interesó por mis propias maneras de hacer las cosas. Buen Provecho!

la de los dos es el tema si el otro es maleducado no es mi problema es suyo yo saludo pero si no recibo respuesta no es culpa mia eso que quede claro es el otro

La clase está, Juan Manuel, en que usted no le educa, sino que lo hospeda en su casa temporalmente; el muchacho viene educado, de un modo u otro; en su casa, debe observar las normas por las que se rige la convivencia; es su sobrino quien debe aprender que, fuera de casa, existen otras normas, otras educaciones, con lo provechoso que ello es, si sabe usted hacérselo comprender de un modo amable, que es así como se educa, no con meras prohibiciones sin razón; quiero decir, importa saber, tanto más que no puede comer a cualquier hora, el porqué no se debe hacer, por ejemplo.

Clave, no "clase"

Personalmente, creo que actuas correctamente. El niño, mientras viva contigo, es "uno más" de la familia y, como tal, debe adoptar las costumbres que se tienen en el núcleo familiar. Al fin y al cabo, no se trata de que cambies los principios por los que se le ha educado hasta el momento (por ejemplo, si su familia es vegetariana y el niño a sido educado en ella, no debes interferir en ese sentido) si no de que comparta con la familia las costumbres (especialmente si en tu casa hay otros niños) de convivencia.

Un saludo,