Depende de la importancia que le des tu mismo a la llamada VS contertulio.

Si decides que la llamada es mas importante..toca disculparse ante tu contertulio, el cual sabra entender la situacion perfectametne.

Si decides que la llamada es menos importante que tu conversacion, entonces has de rechazarla con plena naturalidad.


Las cosas bien hechas bien parecen.

Ultimamente el móvil se ha convertido en el centro del universo. Parece que todo deba detenerse cuando "suena" dicho aparato. Yo considero que lo correcto va en este orden: 1º) Disculparse con los interlocutores 2º) Apartarse discretamente para hablar 3º) Si la llamada no es importante, posponerla y, finalmente 4º) Disculparse de nuevo por la interrupción.
Hemos de hacer que el móvil sea un medio, pero no un fin en si mismo, y no debemos darle el protagonismo que nunca ha merecido. Si encima no elevamos la voz en exceso ... eso ya sería "gloria bendita"

Merche, salvo que estuvieras en una importante reunión o en un espacio cerrado, como un teatro, iglesia, cine, etc. no me parece incorrecto lo que comentas. De hecho, si la llamada es importante, puedes despedirte de tus contertulios del patio, para seguir con tu conversación. Otra cosa es que seas de esas personas que viven para el móvil, y están cada poco contestando llamadas. No obstante, cada cual que haga lo que considere más oportuno. Como dice Esther "nunca llueve a gusto de todos".

Estando en un sitio "abierto" no haces mal cogiendo el teléfono pero si estas en mitad de un conversación debes excusarte como hiciste("disculpa un segundo"), intentar no extender demasiado la conversación (puedes optar por pedir a esa persona que te llame en cinco minutos o llamarle tu en un rato) y volver a disculparte levemente al incorporarte a la conversación ("perdona por la interrupción; como te iba diciendo...). Si la otra persona se ofende, no era tu intención - hay veces que no podemos hacer nada para evitarlo: "nunca llueve a gusto de todos".

Si podemos evitarlo, rechazamos la llamada y más tarde la devolvemos.
Personalmente me sienta muy mal que una persona con la que estoy hablando atienda el teléfono o el móvil. Me está indicando lo poco que le importo frente a una llamada de la cual ni siquiera sabe de quien es.

Hizo bien si se disculpó. Debío hablar, como le indica Esther, poco tiempo o, mejor, devolver la llamada; no obstante, le recomiendo no hablar mucho con las madres en el patio del colegio: suelen ser personas y conversaciones horribles, como resalta de su relato. Recoja a su hijo, cruce cuantos cordiales saludos estime, pero no se entretenga demasiado en conversar.