Visitas a autoridades locales de los puertos
Cuando un buque llega a puerto en visita o escala no habitual, además de las obligadas visitas...
Escalas y llegadas a puerto de buques
Visitas a autoridades locales de los puertos
Cuando un buque llega a puerto en visita o escala no habitual, además de las obligadas visitas a autoridades navales por asuntos del servicio, el Comandante, o el Oficial que éste designe, realiza visitas de cumplido a las autoridades militares, civiles, locales o regionales residentes en el puerto. Se exceptúan los puertos donde hay Autoridad Naval Superior (Capitán o Comandante General, Jefe de Sector Naval), en que la autoridad del Almirante cubre este protocolo.
En estas visitas se intercambian cumplidos sociales y se hace entrega de recuerdos de la escala del barco en el puerto, tales como fotografías y metopas. Las fotografías se entregan en blanco, pero hay que estar siempre dispuesto a dedicarlas si así nos lo piden.
Estas visitas son correspondidas, normalmente dentro de las veinticuatro horas siguientes por las autoridades visitadas o sus representantes.
Te puede interesar: Saludos entre buques. Ceremonial marítimo
Si se trata de una agrupación, la visita la realiza el Almirante, Comandante de la agrupación, o el Comandante de buque más antiguo, reservando la presentación de los Comandantes de los demás buques para el momento de la devolución de la visita por las autoridades.
Para informar de cuáles son las autoridades objeto de visita, de su importancia relativa, así como para concertar horarios, citas, transportes, etc., será muy raro que no se encuentre en el muelle o acuda a bordo en el bote del práctico un Oficial de la Comandancia de marina, si el puerto es español, o algún agregado militar o naval, acompañado de un funcionario diplomático, si el puerto es extranjero.
En puerto extranjero, la primera visita será siempre al Embajador o Cónsul General.
Si circunstancias extraordinarias no lo impiden, además de la recepción de autoridades como devolución de visita, suele celebrarse a bordo una comida ofrecida por el Comandante a las máximas autoridades y, antes de la partida, una fiesta más amplia para agasajar a miembros notables de la sociedad local y a los amigos que se hayan hecho; y si es en el extranjero, desde luego a la colonia española.