Protocolo, medio de comunicación en la política

El político actual debe ser humanista, debe tener sensibilidad y alto sentido de la tolerancia...

Director de Ceremonial y Protocolo municipio de General Deheza, Periodista, Locutor Nacional, Organizador

 

El protocolo en la política. Una forma de mantener el poder de un gobierno Gustavo Rafael Caballero

Una forma de mantener el poder de un gobierno

Dentro de las estrategias de marketing político que desarrollan los partidos políticos para convencer al electorado, el protocolo cumple un papel fundamental.

Los políticos en carrera saben que la imagen es uno de los instrumentos más poderosos que deben mostrar ante la sociedad. No es lo mismo transmitir la imagen fuerte y consistente en el transcurso de los actos, que una débil y desordenada. La manera en que muestran a la ciudadanía cómo son y qué proponen a través de los medios de comunicación o las redes sociales es fundamental y, en la puesta en marcha de ese marketing político, el protocolo es clave.

Los valores que la sociedad debe percibir en un político como parte de su imagen, están relacionados en primer lugar con la confianza, la credibilidad, la honestidad y la integridad.

El político actual debe ser humanista, debe tener sensibilidad y alto sentido de la tolerancia. Más que nadie, el político está obligado a mostrar solidaridad con los grupos marginados y ser guardián de la pluralidad y la diversidad ideológica de estos tiempos.

Considero que la aplicación del protocolo es una excelente forma de mantener el poder de un gobierno y lo entiendo también como una forma de prestigio y no solo de autoridad reconocida. Es también una manera de conseguir el reconocimiento y la confianza por parte de la sociedad.

La ausencia o no de banderas, el vestuario de los protagonistas o la elección de una música u otra en un acto político comunican más de lo que creemos.  Si hablamos de vestuario, no solo hablamos de la vestimenta acorde para ese momento, también hay que tener presente el comportamiento adecuado a las situaciones que se viven en esos instantes. Aquí, se incluyen el respeto, la educación y la amabilidad, todo transmitido mediante una comunicación.

En función de los actos en los que participen los candidatos políticos, los requisitos de protocolo variarán, pero siempre es necesario cumplirlos, ya que lo que se pretende es mostrar un político de calidad.

El protocolo no debe ser algo atemporal que no pueda cambiarse, sino que tiene que adaptarse a los tiempos y a las circunstancias. Tomar una u otra decisión en cuestiones protocolarias puede determinar la reacción de los ciudadanos y, con ello, determinar su voto.

El protocolo debe reflejar la esencia adecuada de cada político.