Comportamiento social en Guatemala. Saber estar en público. Educación y cortesía.
En cualquier conversación siempre debe utilizar el usted para dirigirse a cualquier persona.
Los saludos tanto en el ámbito laboral como el social son los tradicionales de otros muchos países: el apretón de manos, para las personas recien presentadas, ya sean hombres o mujeres. En el caso de un conocimiento previo o un cierto grado de confianza, el apretón de manos para los caballeros y un beso en la mejilla para las señoras. Y en caso de amistad, familiaridad o mucha confianza se puede llegar al saludo con un abrazo, además del tradicional apretón de manos o beso en la mejilla.
Los tratamientos de cortesía, Señor, Señora y Señorita (siempre a utilizar con el apellido) y Don o Doña (siempre a utilizar con el nombre). En algunos casos se utilizan los títulos profesionales.
En cualquier conversación siempre debe utilizar el usted para dirigirse a cualquier persona, ya sea hombre o mujer. No se debe utilizar otra fórmula para el trato con otras personas salvo que ellas nos indiquen lo contrario.
En sus conversaciones mantenga una distancia prudencial con respecto a sus interlocutores. No debe ser demasiado cercano ni en el trato ni en las distancias.
En cualquier evento la derecha de los anfitriones es el sitio de mayor honor o precedencia. La derecha del anfitrión para la señora de mayor rango o categoría. Y la derecha de la anfitriona para el invitado de mayor rango o categoría.
En el transporte público las mismas normas de cortesía que en cualquier otro país. Ceder los asientos a las señoras, las personas mayores y personas con problemas de discapacidad; dejar salir siempre antes de entrar a un transporte; ayudar a las personas cargadas con paquetes, con coches de bebé, etc. No gritar no hacer gestos obscenos en público o utilizar vocabulario soez o con muchas palabrotas.
Ceder el paso en puertas, ascensores, etc. a las señoras y a las personas mayores. En los casos de coincidencia sexo y edad, prevalece la edad. Por ejemplo, entre dejar pasar a una señora o a un señor de avanzada edad, se deja pasar al anciano en primer lugar.