Animales domésticos. Normas básicas para la convivencia con mascotas. Responsabilidades y obligaciones

Quien tiene un animal, tiene una responsabilidad. El dueño de un animal, es responsable de los actos del mismo

 

Convivencia con mascotas. El perro y el gato son amigos protocolo.org - foto base FP Pro

Reglas de etiqueta para los dueños de mascotas. Mascotas con 'buenos modales'

Mascotas bien educadas, dueños responsables

Tener un animal doméstico en casa supone tener una gran responsabilidad. Una mascota no es un juguete. Esto hay que tenerlo muy claro y dejárselo muy claro si tenemos niños pequeños. Un animal es un ser vivo que necesita tener cuidados y atenciones. Pero es bueno recordar, que no debemos 'humanizar' a las mascotas. Son animales a los que debemos cuidar, atender y educar, pero no debemos quererlos convertir en 'personas'.

Educar a nuestras mascotas es muy importante. Sobre todo a aquellas que 'salen de casa', como por ejemplo, un perro. Si el animal sabe comportarse 'hablará', bien de sus dueños. Un animal bien educado, demuestra el interés de sus dueños por un comportamiento adecuado de la mascota en cualquier situación. Ahora bien, una cosa es educarlos y mimarlos, y otra, como hemos comentado anteriormente, es tratarles como a personas -darles de comer a la mesa, por ejemplo-. Todo tiene sus límites, al menos cuando estamos en público.

Conseguir que nuestras mascotas estén bien educadas requiere su tiempo. Como cuando hablamos de educar a los hijos, enseñar a comportarse de forma apropiada requiere ser muy pacientes y perseverantes. Pero el resultado, va a merecer la pena.

Aprender a tener responsabilidades

Quien tiene un animal, tiene una responsabilidad. El dueño de un animal, es responsable de los actos de su mascota. Cualquier daño que pueda producir es responsabilidad del dueño. Y si ocurre algún percance, tendrá que hacer frente a los daños o estropicios. No es correcto ni legal escaquearse, e incluso negar la propiedad del animal -por ejemplo, hay casos de perros que ocasionan daños, e incluso accidentes y sus verdaderos dueños ignoran su responsabilidad, negando incluso la propiedad de los mismos-. Un comportamiento de este tipo dice bien poco de quien lo tiene y del poco respeto que tiene tanto por las personas como por sus mascotas.

Reglas de etiqueta y normas a tener en cuenta cuando tenemos una mascota

Tener un animal es tener una serie de obligaciones que debemos estar dispuestos a cumplir. Si no vamos a ser responsables es mejor que no tengamos ningún animal a nuestro cargo.

  • Debemos estar siempre atentos para ver que hace nuestra mascota. Por muy bien educado que esté el animal, es posible que pueda tener un comportamiento distinto cuando interactúa con otros animales o con otras personas.
  • Tenemos que aprender a respetar los lugares donde se les prohíbe la entrada -por mal que nos parezca-. Salvo por una causa justificada, los dueños de mascotas deben acatar las normas.
  • También, debemos procurar evitar que moleste a otras personas o a otros animales, bien sea en el parque, en una terraza o en cualquier otra parte. Cuidado con esos lametones cariñosos, con esos ladridos insistentes, etcétera, etcétera.

"No es correcto 'imponer' la presencia de animales a otras personas que comparten un espacio con nosotros"

Limpieza e higiene: el cuidado de nuestra mascota

Siempre que saquemos a nuestra mascota, tenemos que llevarnos una bolsa u otro 'contenedor' para recoger los "excrementos" que deja nuestro animal. Debemos evitar, así todo que haga ciertas necesidades -como orinar- en las entradas de los portales, en bicicletas o motocicletas, en sitios frecuentados por niños, etcétera-.

Si tenemos algún tipo de negocio relacionado con la alimentación o la hostelería, no debemos permitir, bajo ningún concepto, que el animal permanezca en las instalaciones donde se trabaja con alimentos -cocinas, salas de envasado o despiece, etcétera-.

Siempre que toquemos a nuestra mascota, no debemos olvidarnos de lavarnos las manos antes de manipular cualquier tipo de alimento o envase que vaya a contener bebida o comida. O simplemente, antes de poder tocar a otra persona, como por ejemplo, para saludarla, o antes de tocar un niño, etcétera.

Dueños educados y animales educados para la convivencia

No debemos imponer nunca la presencia de animales a otras personas. En caso de que tengamos una visita no "obliguemos" a los invitados a soportar a nuestra 'adorable' mascota, por mucho que ellos educadamente digan que no les importa.

No es muy agradable ver como nuestro perro olisquea a los invitados o como el gato se sube encima de alguno de nuestros invitados y le llena de pelos su precioso traje oscuro, por poner algunos ejemplos. Es una falta de educación de los dueños, imponer la presencia de sus animales de compañía a los invitados.

De igual manera, si somos nosotros los que vamos de visita, no es correcto ni apropiado presentarnos con nuestra mascota, por muy cariñosa y adorable que sea. Hay excepciones, por ejemplo, si vamos a la casa de alguien de mucha confianza que nos permite hacer la visita con nuestra mascota. O bien, si visitamos una hacienda o finca. Siempre, hay que pedir permiso a los dueños de la casa.