La familia y su esencia: relaciones familiares para la buena educación de los hijos. Buenas familias y buenos modales
El rol de la familia y su importancia en la educación infantil. los buenos modales se aprenden en familia
Las buenas relaciones familiares son la base ideal para criar niños bien educados
La familia es el núcleo más apreciado de nuestra sociedad. Familia, en el más amplio sentido de la palabra. Se ha demostrado que pasar tiempo en familia repercute de manera muy directa en el aprendizaje social y emocional de los niños. Pero podemos comprobar a diario, en muchos casos, que el tiempo en familia está en peligro. Debemos aprender a valorar la importancia que tiene, tratar de preservar, en la medida de lo posible, pasar un tiempo en familia cada día. Hay que hacer un esfuerzo conjunto para que podamos estar juntos en algún momento del día.
"La verdadera esencia del crecimiento y el aprendizaje de los niños radica en el contacto humano y la conversación", afirman algunos reconocidos expertos en pediatría. Actualmente, nos enfrentamos a un 'peligro': desde el momento en que nacen hasta que se aproximan a la adolescencia -incluso después, también-. Este peligro es la influencia de la tecnología, especialmente el tiempo que pasan frente a una pantalla. Este tiempo frente a una pantalla puede tener consecuencias en su bienestar físico y emocional. Puede afectar tanto a la cantidad de sueño hasta cómo se comportan con sus amigos. Dejarles frente al televisor para que no den guerra o molesten; no controlar el uso de teléfonos celulares-móviles o tabletas; no establecer horarios para el uso de las consolas de juegos... todos estos hábitos son nocivos para la educación de los niños.
Te puede interesar: Niños educados. Niños con buenos modales
Limitar el tiempo frente a la pantalla y reforzar la importancia de la conversación con las personas de su entorno, principalmente familiar, tiene implicaciones significativas en su salud mental y en la mejora de sus habilidades sociales.
La mesa, un tablero de juego imprescindible en su educación
¿Qué tiene que ver todo esto con los buenos modales en la mesa? La mesa es una representación simbólica de la vida en sí misma. Es la oportunidad de estar juntos, de aprender de otras personas de la familia. Esta interacción diaria con otras personas, adultos y otros niños, es donde inicia su camino la educación en la comprensión, el respeto y la tolerancia hacia el crecimiento personal de los más pequeños.
Los modales son una extensión de nuestra consideración y empatía. Al fomentarlos desde la más temprana edad, enseñamos a nuestros hijos a tratar a otros con respeto y amabilidad. Esto, en esencia, refleja cómo queremos que nuestros hijos sean tratados y cómo queremos que traten a otros en una sociedad cada vez más compleja y globalizada.
Lo maravilloso de la vida familiar es su capacidad de renovación. A pesar de los desacuerdos o desavenencias ocasionales, cada día se presenta una nueva oportunidad para comenzar de nuevo. Cada día debería comenzar con el esfuerzo de cada miembro de la familia de tratarse con mayor cortesía y buenos modales.
Los padres tienen la fortuna, pero también la gran responsabilidad, de estar presentes desde el inicio, ayudando a sus hijos a aprender y crecer. En un mundo lleno de distracciones, es esencial recordar la importancia de la interacción humana y el papel vital que juega la familia en el desarrollo integral de cada individuo. Porque, al final del día, la familia importa mucho más de lo que algunos creen.