Citas de negocios en Chile. Reuniones y etiqueta empresarial. Horarios, vestuario

Los períodos vacacionales más habituales en Chile son enero y febrero, por ello no son los mejores meses para concertar una cita de negocios

 

Negocios en Chile. Hombre de negocios. Etiqueta empresarial foto base ThorstenF - Pixabay

Etiqueta empresarial: reuniones de negocios en Chile

Una buena forma de empezar relaciones comerciales con otras empresas en Chile es contar con la colaboración y los servicios de un intermediario: consultor, bufete o cualquier otra empresa o institución que nos asesore. Este tipo de servicios nos facilita contactos, gestiones, papeleos y muchas otras cuestiones.

Si vamos a concertar una cita de negocios, vamos en tener en cuenta que los períodos vacacionales más habituales en Chile son entre enero y febrero. Por esta razón, no son los mejores meses para concertar reuniones o entrevistas. No obstante, si son meses en los que podemos aceptar una cita de negocios si nos proponen alguna fecha.

Como en todas las reuniones, siempre debemos intentar reunirnos con ejecutivos de alto nivel, o con los propios dueños de la empresa. Esta labor comienza contactando con sus secretarias o asistentes que serán los encargados de 'abrirnos' las 'puertas' de acceso a sus jefes. Si somos educados y respetuosos con todas estas personas, podemos tener un punto a nuestro favor. Aunque no es conveniente hacer un regalo en las primeras citas, si que puede ser un buen gesto tener un pequeño detalle en el futuro con estas personas.

Las citas se deben hacer con al menos tres semanas de antelación, teniendo que hacer una confirmación previa antes de salir de viaje y otra al llegar al destino. Los cambios de última hora puede trastocar nuestra agenda.

Los horarios para una reunión de negocios en Chile y los horarios comerciales

Los mejores horarios para concertar una cita son de 10 de la mañana a 1 del mediodía y de 3 a 5 de la tarde. Cuando las citas son a media mañana se suelen prolongar hasta por la tarde, mediando una comida. Durante el almuerzo además de comer se puede seguir charlando  de negocios -si nuestros anfitriones sacan el tema- o bien se puede aprovechar para charlar sobre otras cosas que no sean temas de negocios y profundizar en un conocimiento más personal.

Los horarios de oficina de lunes a viernes son de 9 de la mañana a 5 de la tarde. Se permite una pausa para comer de hasta dos horas. Las oficinas del Gobierno tienen un horario de 9 de la mañana a 4,30 de la tarde.

Para cualquier cita programada, bien sea de negocios o bien sea un compromiso social, la puntualidad es imprescindible. No es correcto hacer esperar a otras personas que tendrán muchas otras cosas que hacer. También es posible que tengamos que esperar en alguna ocasión, pues la puntualidad no siempre es posible. Aunque como invitado nos pueden dar un margen de cortesía, es mejor llegar puntual. De lo contrario, no será una buena forma de empezar las relaciones comerciales.

Las notaciones de fecha y puntuación son al estilo europeo. La fecha se expresa como día, mes y año. Los signos de puntuación son la coma para los decimales y el punto para los miles.

Etiquete empresarial en Chile: algunas características generales

Los empresarios chilenos son de valores tradicionales y suelen tener un sentido muy marcado de la honestidad y la profesionalidad en los negocios. Por este motivo, debemos tener en cuenta estos valores durante todas las negociaciones y cuidar nuestro comportamiento, tanto dentro como fuera de la empresa.

El vestuario, en la medida de lo posible, de corte clásico. Para los hombres, un traje oscuro, una corbata y unos zapatos de cordones. Para las mujeres trajes de chaqueta o combinaciones de falda-blusa, pantalón-blusa. En eventos sociales, el vestuario será el que requiera la ocasión o el que sea más apropiado dependiendo del tipo de evento.

Hay que tener en cuenta la época del año en la que viajamos a Chile, para elegir de forma adecuada el vestuario que tenemos que llevar en nuestra maleta. También, debemos tener en cuenta, la posibilidad de tener que acudir a algún tipo de compromiso social.