Regalar en Costa Rica. Regalos de empresa. Detalles con los anfitriones

Solamente al finalizar un proceso de negociación se puede hacer un regalo, siempre un obsequio de un valor razonable

 

Costa Rica regalos y negocios. Regalo bien envuelto foto base adonyig - Pixabay

Reglas de cortesía para hacer regalos en Costa Rica

Cuando empezamos una relación comercial con otra empresa no es recomendable hacer ningún tipo de regalo. Puede interpretarse como una forma de querer influir en las decisiones posteriores. Solo se admite, como regalos, algún detalle de tipo publicitario: bolígrafos, calendarios, bloc de notas, etcétera.

Si las negociaciones nos hacen tener varias reuniones antes de llegar a un acuerdo -o no acuerdo-, es posible que se establezca algún vínculo más personal y de confianza con alguna persona de la otra empresa. En estos, se puede tener un pequeño detalle -del tipo unos dulces, una botella de vino o algún regalo típico de nuestro país- pero a título personal. Incluso, si es posible, se lo daremos fuera de las instalaciones de la empresa -en una comida, por ejemplo-.

A medida que avanzan las negociaciones, tampoco es correcto hacer regalos en el entorno empresarial. Los regalos en el mundo de la empresa pueden ser 'malinterpretados' y puede causar el efecto contrario al deseado. Es decir, pueden perjudicar más que beneficiar.

Únicamente se puede admitir algún tipo de regalo -de un valor razonable- al finalizar un proceso de negociación. Tampoco es necesario que el regalo sea un objeto; se puede invitar al equipo de la empresa con el que hemos negociado a una fiesta, a una cena o a algún tipo de evento -por ejemplo, a un partido de fútbol-.

Etiqueta social y regalos en Costa Rica

Los negocios no solo tienen 'implicaciones' profesionales sino también compromisos sociales. Si nos invitan a una casa en Costa Rica, es correcto llevar un detalle para los anfitriones: unos bombones o unos dulces, una botella de vino o una bebida que les guste, o bien unas flores. Si sabemos que tienen hijos pequeños, podemos llevarles un pequeño detalle también para ellos.

Los obsequios publicitarios quedan reservados para en ámbito empresarial. No es muy apropiado regalar un objeto de este tipo a nuestros anfitriones. Los regalos publicitarios se pueden dar a los empleados de la empresa anfitriona con los que tengamos más trato: secretarias, asistentes, administrativos, etcétera. Si la empresa no es muy grande, se puede llevar una cajita de obsequios para que los repartan entre todos los empleados.

Los regalos, tanto en el ámbito empresarial como en el social, deben ser prudentes y nada ostentosos. Los regalos se hacen para agradar y  sorprender pero no para molestar u ofender. No se deben regalar cosas que pongan en un compromiso a la otra parte -regalos muy caros, regalos muy personales...-.

'Vestir' los regalos. Debemos cuidar el envoltorio de los regalos, pues es la carta de presentación de los mismos. Un envoltorio elegante hace más importante el regalo y le aporta 'categoría'. Un regalo bien envuelto dice mucho de la persona que hace el regalo.