Etiqueta en Italia. Generalidades sobre usos sociales y costumbres en Italia

La amabilidad de los italianos es manifiesta. Siempre atentos a cualquier deseo y con ganas de cumplir con nuestras peticiones

 

Etiqueta en Italia. Etiqueta en Italia. Generalidades foto base Free-Photos - Pixabay

Reglas de etiqueta en Italia: buenos modales y usos sociales en Italia

Reglas de cortesía y buenos modales en Italia

Los italianos gozan de una estupenda fama en cuanto a su cordialidad. La amabilidad de los italianos es muy marcada por su carácter tan extrovertido. Siempre están atentos a cualquier deseo... pero no nos dejemos engañar, porque algunas veces, una cosa son las promesas y otra la realidad. Ofrecen mucho, pero pueden olvidarse de alguna de las cosas prometidas.

Nos vamos de compras. Las propinas

Si vamos de compras, sobre todo en los mercados, les encanta regatear -aunque esta costumbre se va perdiendo poco a poco-. Cuidado, porque hay que ser muy habilidoso para salir 'airoso' de un 'duelo de regateo'.

Si nos apetece 'navegar' en una góndola por los canales de Venecia, o bien dar un paseo en un coche de caballos por la preciosa ciudad de Roma, etcétera, procuremos fijar el precio antes de subir, o podríamos llevarnos una desagradable sorpresa con el importe final del trayecto.

Las propinas en los restaurantes y otros servicios (como góndolas, coches de caballos, taxis, etcétera) son bien aceptadas y esperadas. No hay un porcentaje fijo ni establecido.

Si estamos en un restaurante y queremos la cuenta, podemos decir: "Cameriere, il conto" o "Pagare prego !". Nos suelen contestar: "Súbito, signore".

La pasta es la comida reina de casi todas las mesas en Italia y salirse de este menú puede resultar realmente caro. El nivel de la cocina habitual, es modesto en la mayoría de los restaurantes, aunque también Italia cuenta con establecimientos de mucha categoría. Si hacemos un encargo y nos dicen que estará listo en una hora, no debemos enfadarnos si pasada esa hora, aún no lo tienen listo.

Tratamientos de cortesía en Italia

Los tratamientos cotidianos, los que podemos llamar tratamientos a pie de calle, tienen sus peculiaridades. Casi todas las profesiones tienen el suyo propio. Un funcionario, un periodista o un empleado de un banco es un Dottore, o Dottoressa si es una señora. Los profesores universitarios y profesores de música son Professore o Professoressa. Un abogado, es Avvocato y quien repara algo es un Ingenierie. Como hemos comentado, hay casi un tratamiento para cada tipo de profesión.

Respecto a los 'títulos sociales', los más utilizados son el de Cavaliere y Commendatore. Pero si hablamos de Ministros y Embajadores, son Eccelenza. Las damas de cierto nombre y rango son tratadas de Donna, seguido de su correspondiente nombre de pila -se omite el apellido-. Los altos cargos eclesiásticos, son tratados de Eccelenza.

El vestuario en Italia. Referente en la moda

El italiano es, por regla general, una persona elegante a la que le gusta vestir a la moda. Italia es uno de los países que marca tendencia en el mundo de la moda, junto con Francia. Italia tiene grandes diseñadores de reconocido prestigio mundial.

Cuando visitamos Italia, aunque es un país occidental, es de costumbres bastante religiosas. Por este motivo, debemos vestir con 'cierta prudencia' si visitamos iglesias y otros templos religiosos -es aconsejable evitar minifaldas, escotes amplios, pantalones cortos, camisetas sin mangas y prendas similares-. En este  artículo "Código de vestimenta del Vaticano. Audiencias con el papa y otras visitas a dependencias del Vaticano (con vídeo)" damos algunas indicaciones sobre el vestuario adecuado para este tipo de visitas.

El italiano suele ser una persona extrovertida, de carácter bastante afable y muy expresivo

Otras costumbres y hábitos de los italianos

La puntualidad no es uno de los fuertes de los italianos, así como utilizar un tono de voz bajo. Al igual que otros países como España, son más bien 'gritones' y de fuerte temperamento. El bullicio de sus conversaciones es perfectamente 'palpable' en cualquier establecimiento como bares o en los transportes públicos, por poner algunos ejemplos. Como hemos comentado anteriormente, la puntualidad para la entrega de algunos encargos y trabajos, o para prestar algún tipo de servicio, puede ser un poco frustrante.

Las presentaciones, como en cualquier otro país, es mejor que las haga una tercera persona. La mayoría de los italianos son muy efusivos al realizar un saludo, aunque nos acaben de conocer. No es de extrañar que nos den un abrazo o un beso en la mejilla. Son bastante dados al contacto físico.

Cuidado, con los 'cariñosos abrazos' de gente desconocida. Se pueden convertir en el 'abrazo de Judas', pues hay una gran "picaresca" y mucho 'espabilado' que abusa de la buena fe de la gente, sobre todo en las zonas más turísticas del país. Simplemente, hay que tener un poco de cuidado y no ser demasiado confiados.