El comportamiento y los buenos modales de los niños en el camping y en la playa
Los más pequeños de la casa deben comportarse de forma educada en los espacios públicos donde se convive con otras personas
Consejos para que los niños se comporten de forma correcta en un camping o acampada
¿Qué normas deben seguir los niños en el camping para no molestar a los demás?
Los campings y sitios de acampada suelen ser espacios muy abiertos compartidos por muchas personas. Por esta razón, hay que tener mucho cuidado con los niños y el disfrute que hacen de estas zonas comunes.
El primer punto a tener en cuenta cuando hablamos de los niños, es la vigilancia de los padres. Los padres deben estar atentos a las acciones de sus hijos, pues los niños se suelen comportar como tal y no suelen tener ningún tipo de referencia o de percepción del peligro o del mal comportamiento.
Los padres deben ser los que deben velar porque ese comportamiento sea correcto. No pueden ser simplemente 'padres reactivos' que únicamente reaccionan cuando ha pasado algo. Es mejor ser previsores.
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La educación debe ser un tema constante y recurrente. Hay que educarles en casa y fuera de ella; este puede ser un buen momento para que el niño ponga en práctica lo que han aprendido, o bien, puede ser una oportunidad para aprender cosas nuevas.
Debemos que evitar que los niños chillen, gritan o den voces siempre, pero sobre todo a las horas del descanso. Tampoco deben correr entre las tiendas o parcelas del resto de los campistas o junto a las sombrillas y toallas de otras personas.
Los juegos, como jugar a la pelota o cualquier otro juego, en el que la pelota, el aro o el disco pueda terminar en "casa" de algún vecino lejos de las zonas "pobladas". Ni que decir tiene que está prohibido y se debe reprender el mal hábito de lanzar cosas como, piedras, tapones con el tirachinas, globos de agua, etcétera.
Cuidado con el vocabulario de sus hijos. En los campings y las playas hay muchas familias y no es de buen gusto oír a sus hijos decir palabrotas entre ellos o bien cuando juegan con otros niños. ¿Se imagina que pensarán los otros padres de sus hijos e, incluso, de ustedes mismos?
La vigilancia de los niños debe evitar que se apropien de las cosas de otros niños o de los mayores. Hay que enseñarles que eso no está bien. Compartir no es una obligación, sino una opción.
Para terminar, como hemos dicho en muchas ocasiones, vigilar a los niños con "cien ojos" para evitar que surja un conflicto. La mejor solución a un conflicto es que no llegue a producirse. También, con una buena vigilancia podemos evitar accidentes más graves, sobre todo si hablamos de niños muy pequeños (niños que caen a una piscina, que se alejan de la orilla del mar, etcétera). ¡Mucho cuidado! Se pueden producir accidentes de consecuencias muy graves.