06. Símbolos académicos. El himno de la universidad.
El Himno de la Universidad fue escrito por la poetisa colombiana de ascendencia libanesa, Olga Chams Eljach (Meira Delmar), y la música estuvo a cargo de Anita Matarazzo.
Himno de la Universidad.
Como lo cita el diccionario de la R.A.E., un himno es una composición musical emblemática de una colectividad, que la identifica y que une entre sí a quienes la integran. El Himno de la Universidad fue escrito por la poetisa colombiana de ascendencia libanesa, Olga Chams Eljach (Meira Delmar), y la música estuvo a cargo de Anita Matarazzo.
El Himno se debe utilizar siempre que se lleven a cabo ceremonias institucionales de graduación, premiación, actos protocolarios, instalaciones de eventos académicos y cuando la ocasión lo requiera, caso en el cual se podrá solicitar asesoría de la Dirección de Comunicaciones y Relaciones Públicas.
En ningún caso, deberá sonar como música de fondo en ningún caso.
Con el fin de invitar a que los miembros de la comunidad universitaria lo puedan cantar al unísono, se recomienda la utilización de la versión audiovisual con subtítulos del himno, siempre que la actividad lo permita, con el fin de invitar a que los miembros de la comunidad universitaria lo puedan cantar al unísono.
En compañía de otros himnos nacionales, departamentales o de otras instituciones podrá sonar de último, cediendo el honor al himno de la institución invitada.
La forma correcta de escuchar un himno es de pie con los brazos a lado y lado del cuerpo. Ninguna otra posición es bueno adoptarla (manos al frente o detrás, brazos cruzados, una pierna doblada, son posturas incorrectas). Los himnos no se aplauden.
Letra: Olga Chams Eljach (Meira Delmar).
Frente al mar que meció nuestra cuna
el Caribe de mágica luz,
una hermosa divisa proclama
¡alegría, verdad, rectitud!
La levanta en sus manos abiertas
esta casa que enseña a triunfar
la reciben sus hijos cantando
¡rectitud, alegría, verdad!
Como nave que zarpa en el alba
y no teme afrontar la tormenta
vamos juntos con alma sedienta
de armonía, decoro y saber.
Y al llegar a la meta esperada,
jubilosos allí entenderemos
que la frente signada tenemos
con la lumbre del amanecer.
Frente al mar que meció nuestra cuna
el Caribe de mágica luz,
una hermosa divisa proclama
¡alegría, verdad, rectitud!
La levanta en sus manos abiertas
esta casa que enseña a triunfar
la reciben sus hijos cantando
¡rectitud, alegría, verdad!
Por la Patria que vive en nosotros,
en el río, la tierra y el viento,
hoy juramos con férvido acento
en la lucha sin tregua a seguir
continuar el camino que un día
emprendimos en pos de la gloria
y alcanzar la anhelada victoria
de un fecundo y feliz porvenir.