¿Cómo hacer una invitación a una persona?
Las invitaciones se pueden hacer de forma verbal o bien de forma escrita. Todo depende del tipo de acto o evento que se vaya a celebrar
Cómo invitar y cursar una invitación
Invitaciones por escritos e invitaciones de palabra
Las dos formas más habituales de hacer una invitación son:
1. Por escrito.
2. De forma verbal.
Las invitaciones escritas pueden ser formales o informales. Las verbales son siempre informales, sin etiqueta o solemnidad alguna.
Las invitaciones verbales
Una invitación verbal la podemos hacer en entornos de confianza y cierta familiaridad. Se hacen cuando la fiesta, celebración o reunión es para unas pocas personas y son cercanas a nosotros. Una cena entre amigos, una pequeña fiesta de despedida, una comida familiar, etc. Cuando el evento es más multitudinario, solemne o es de mayor "etiqueta" debemos utilizar la invitación escrita.
Las invitaciones verbales pueden hacerse de forma personal o de forma no presencial (vía telefónica, messenger, skype, WhatsApp, Telegram, etcétera). Aunque sean invitaciones informales, no es correcto invitar a última hora. Puede dar la sensación de ser el 'relleno de última hora'.
Las invitaciones escritas
Una invitación escrita se puede cursar por diversos medios: por medio de una carta, una tarjeta de invitación, un modelo de saluda o un correo electrónico (e-mail).
El correo electrónico lo podemos utilizar para invitar de una forma menos protocolaria a un acto de relativa importancia.
La carta y la tarjeta de invitación las debemos utilizar para invitar a eventos más solemnes y de cierta importancia. Las entregas de premios, recepciones, fiestas en embajadas, presentaciones de productos o servicios, etc.
Te puede interesar: Partes principales de una invitación formal (con vídeo)
Si el evento no es muy formal pero hay muchos invitados, también debemos utilizar la invitación de forma escrita para invitar, como puede ser el caso de las bodas , evento familiar por excelencia. Es una forma mucha más organizada de llevar el control de las personas a las que invitamos y de las respuestas que podamos recibir.
Cualquiera que sea el "método" elegido para invitar, es apropiado hacer la invitación con un cierto tiempo de antelación. A mayor importancia del evento con mayor tiempo de antelación hay que cursar la invitación.
Si en la invitaciones se indica confirmación y hay invitados que no responden, es posible hacer una 'ronda' de llamadas o establecer un nuevo contacto para saber si van a asistir o no al acto o evento al que han sido invitados.