Cómo vestir en Semana Santa

El vestuario para participar en la Semana Santa solo pide un poco de prudencia, decoro y sentido común

 

Semana Santa - Pujar paso. Semana Santa - Pujar un paso - Papones - Cofrades jackmac34 - Pixabay

Guía para vestir en Semana Santa

Casi todo el mundo ha podido ver en primera persona en alguna procesión de la Semana Santa, personas con indumentarias bastante poco apropiadas para la ocasión -tanto dentro como fuera de la procesión-. Una cosa es modernizar la tradición y otra, es casi 'molestar' a las personas que se toman la Semana Santa con un profundo sentimiento religioso.

Una procesión no es un desfile de carnaval, aunque para algunos si lo parezca. Nadie obliga a participar en una procesión, pero si lo hacemos, hay que mantener unas mínimas normas de respeto y decoro a la hora de vestir. No solo a la hora de vestir, también en la forma de comportarse -sobre todo guardar silencio, simplemente-.

Muchas cofradías ya recogen en sus estatutos, algunas reglas a este respecto, pero hay que hacerlas cumplir. No vale, mirar para otro lado. Se debe llamar la atención de las personas que incumplen las normas.

Semana Santa. Damas de mantilla en una procesión. fotograma vídeo Diario La Verdad

Vestir de forma apropiada en Semana Santa

Desde las primeras procesiones del viernes de Dolores hasta el domingo de Resurrección durante la Semana Santa hay muchas procesiones en las que participan miles de personas: cofrades, seises, papones, damas de mantilla, autoridades, etcétera.

Qué me pongo para Semana Santa: actual pero con cierta prudencia

Antaño los hombres vestían de traje y corbata, sobre todo los días señalados como el Domingo de Ramos, el Jueves Santo y el Viernes Santo. Actualmente, también se admite un estilo más informal o "casual". Las mujeres vestían de oscuro y algunas vestían de mantilla. En las actualidad, no hay que ser tan estrictos, pero es mejor dejar "aparcados" los escotes pronunciados, las faldas muy cortas, las chancletas o cholitas, etcétera. Simplemente, por una mera cuestión de respeto. Si vamos a presenciar alguna procesión debemos ser un poco prudentes con el vestuario -tampoco es necesario vestir de luto o con ropa de otros tiempos-. Si se pueden tener algunos sencillos gestos que muestran un cierto respeto, como quitarse el sombrero o la gorra, las gafas de sol, etcétera.

Hay que tener en cuenta que a partir del Jueves Santo es mejor elegir tonos algo más oscuros, pues "estamos de luto". Es una forma de mostrar un poco de respeto si asistimos a una procesión como público, no como simples turistas o gente que se encuentra por casualidad una procesión.

Aunque ya hemos hablado de la mantilla en otros artículos del portal, por favor, solo lucirla durante el día. Si se luce por la noche, mejor a modo de velo o mantilla sin peineta -o peina-.

Si salimos en una procesión, ni que decir tiene, que el vestido negro, así como la peineta acorde a nuestra estatura. Hay que dejar los tacones altos en casa, así como los zapatos abiertos. El maquillaje, lo más discreto posible. Las joyas y los abalorios, pocos y muy discretos. Mejor solo llevar la medalla de la cofradía, algún escapulario. También podemos llevar en las manos un rosario, un cirio, un breviario, etcétera. Puede que las cofradía dicten algunas normas a este respecto.

Los hombres que salen en una procesión, pero sin lucir vestuario de una cofradía, mejor de traje y corbata. La propia cofradía nos hará saber si participamos como invitados qué debemos ponernos para ese día.

Tan solo tenemos que recordar que participar en una procesión no quiere decir que tengamos que elegir un "modelito" para destacar, para llamar la atención. Ni tampoco vestir de luto riguroso, ni de carnaval. Siempre hay un término medio. Participar es involucrarse en el profundo sentimiento religioso que conllevan estos días por lo que se pide un poco de prudencia, decoro y respeto. Bien como un mero espectador público, bien como un participante activo en una procesión.