Reglas de comportamiento para saber estar en la mesa

Los buenos modales en la mesa demuestran nuestra buena educación y nuestro saber estar. Las buenas maneras son imprescindibles para compartir mesa y mantel

 

La mesa. Mesa preparada. blmurch

En la mesa hay que ser correctos tanto con la comida como con la conversación

Los buenos modales se adquieren día a día poniendo en práctica todo aquello que hemos aprendido desde nuestra más tierna infancia. Todos los días hay que utilizarlos, en casa, en el restaurante o en el comedor de una escuela, del trabajo o en el lugar donde habitualmente vamos a comer.

La buena educación no es un disfraz que nos podemos poner a nuestro antojo. La buena educación es una forma de vida, de comportarse y de vivir acorde a unas reglas o normas de convivencia. Todo va mejor cuando circulamos por la vida con este código de "circulación" que son los buenos modales.

Reglas de comportamiento a tener en cuenta en la mesa

En la mesa debemos seguir unas mínimas reglas de cortesía para comportarnos de forma correcta.

1. Esperar para empezar a comer. No debemos empezar a comer hasta que todos los comensales estén sentados. Si tenemos una señora o una persona mayor a nuestro lado, es cortés, ayudarle a sentarse moviendo ligeramente la silla para facilitar su acceso. Luego, debemos esperar a que los anfitriones comiencen a comer. Este es el punto de partida para que los demás comensales empiecen a comer.

2. Gestos y acciones. En la mesa no debemos rascarnos, bostezar, utilizar los palillos o mondadientes, descalzarnos, etcétera. Si tenemos que hacer alguna acción incontrolable, como estornudar o toser, lo haremos de la forma más discreta posible, y siempre poniendo nuestro pañuelo, no la servilleta, delante de nuestra nariz o boca. Si alguien cuenta algo muy gracioso no es necesario que nos riamos a carcajadas. Sonreír o reír no requiere de más exageración.

3. Los cubiertos y cómo utilizarlos. Además de saber cómo usarlos, por dónde se toman, hay que saber los alimentos con los que debemos utilizarlos. Los alimentos blandos (huevos, tortillas, verduras, etcétera) no se cortan con el cuchillo. El pan se trocea con la mano, no con cubierto alguno. Para el pescado y la carne empleamos cubiertos distintos. Los cubiertos una vez usados no deben volver a colocarse en la mesa.

4. Servicio de mesas. Las bebidas se sirven por la derecha, así como la comida que va emplatada (ya servida en un plato desde la cocina). La comida que se presenta en fuentes y otros tipos de servicios que se hacen en la mesa, se sirve por la izquierda. Las bebidas se sirven por la derecha. No se debe insistir a un invitado en servirle mucha cantidad o en que repita de un determinado plato.

5. Conversaciones en la mesa. No debemos hablar con la boca llena, ni tratar temas desagradables como enfermedades, accidentes, muertes, temas escatológicos, y otros poco adecuados o polémicos para el momento. No es correcto, tampoco, hablar de cuestiones profesionales en la mesa, ni hablar en otro idioma que no conozcan nuestros compañeros de mesa.

6. El vino y otras bebidas. El maridaje del vino con los alimentos debe ser bien elegido por los anfitriones, acorde al menú servido. El vino debe servirse a la temperatura adecuada. El anfitrión suele probar el vino antes de servirlo a sus invitados. El champán o cava puede ser servido para los brindis, para el postre o puede tomarse durante toda la comida.

7. Al finalizar la comida. No debe quedar la mesa demasiado desordenada o sucia. No se puede fumar en la mesa, ni a la hora de los postres. El café lo debemos beber tomando la taza por su asa y no por el perímetro del recipiente. La cucharilla debe quedar en el plato, pues no se bebe un café o una infusión con la cucharilla metida dentro de la taza.