Protocolo en una boda Real. Nociones

Los invitados deben esperar dentro de la iglesia a los novios, donde tendrán sus sitios reservados

 

Protocolo boda Real. Boda de Felipe de Bordón y Letizia Ortiz. Reglas de etiqueta para una boda Real: cumplir el protocolo foto base Casa de S.M. el Rey - Borja fotógrafos

Reglas de etiqueta para una boda Real: cumplir el protocolo

El protocolo en una boda Real, guarda muchas formalidades y suele ser muy estricto, para que todo el desarrollo de los actos salga perfecto y no haya contratiempos.

Para hacernos una idea muy general de su complejidad, vamos a dar algunas pautas o detalles sobre las características de una boda de este tipo.

La elección de la fecha de la boda

La fecha de la boda es una materia de gran complejidad para evitar que coincida con cualquier otro gran acontecimiento no solo nacional sino internacional. Una vez que la fecha ha sido decidida y comunicada a los medios, empiezan todos los preparativos.

Las invitaciones

Las invitaciones se cursan a distintos ámbitos y personas. Se suele invitar a personalidades destacadas del mundo de la economía, la política, del mundo del espectáculo, etcétera. Además, por supuesto, de a miembros de otras Casas Reales y amigos -sean del ámbito que sean-.

Las invitaciones se envían con al menos unos 45 días de antelación, para que las personas invitadas tengan tiempo de "componer" su agenda de compromisos y confirmar su asistencia.

Reglas de etiqueta: el vestuario

La formalidad del evento requiere que en la invitación se indique el tipo de vestuario requerido. Generalmente, las bodas Reales, suelen ser durante la mañana por lo que el tipo de vestuario es el de día.

Para las señoras, se debe vestir traje corto -hasta la rodilla o un poco por debajo de ella-. Hay que evitar los escotes pronunciados y los modelos excesivamente cortos. El tejido, depende mucho de la época del año en la que se celebre la boda. Siempre debe ser acorde a la estación.

En las bodas durante el día, y sobre todo en el sur, se suele utilizar la mantilla. Y también los grandes sombreros y pamelas. Joyas, las justas, pocas y calidad. Los bolsos de fantasía a juego con los zapatos. Los bolsos, al igual que los teléfonos móviles, nunca se deben dejar encima de la mesa.

Los colores prohibidos en el vestuario de los invitados

Aunque no se suele tener mucho en cuenta, las reglas de etiqueta recomiendan que los invitados no vistan estos dos colores: el blanco, reservado para la novia, y el negro reservado para el luto y los funerales.

Uno de los servicios que suele ofrecer a los invitados, para los que vienen de fuera, es poner a su disposición una serie de profesionales de la imagen -peluqueros, maquilladores, etcétera-.

Para los caballeros, se suele indicar que vistan de chaqué (en esta web se explica con todo detalle en el apartado trajes de etiqueta). Salvo los que pueden vestir algún tipo de uniforme, los caballeros se deben atener a las normas de etiqueta.

Los invitados deben esperar dentro de la iglesia a los novios, donde tendrán sus sitios reservados.

Bodas Reales y su etiqueta. Enlace matrimonial de S.A.R. el Gran Duque Heredero de Luxemburgo con la Condesa Stéphanie de Lannoy foto base Casa de S.M. el Rey

La celebración: el banquete

En cuanto al banquete se suele celebrar en alguno de los Palacios o algún otro edificio del Estado que pueda albergar a un gran número de invitados y que reuna las condiciones necesarias para ello (seguridad, espacio, etcétera).

El menú suele correr a cargo de algún prestigioso restaurador, con amplia experiencia en este tipo de banquetes. Y suele consistir en uno o dos entrantes -que se pueden dividir en fríos y calientes-, un plato de pescado, uno de carne y como postre la tarta nupcial acompañada de algún otro tipo de dulce o helado.

Debido a la gran "variedad" de invitados que hay en una celebración de este tipo, se suele contar con menús alternativos, que son servidos a personas de otras culturas, religiones o por motivos de salud.

Los vinos, al igual que los alimentos del menú, suelen ser de origen nacional, y generalmente aquellos que son bastante representativos, como puede ser un vino tinto de La Rioja, un vino blanco de Galicia, un cava Catalán, etc.

Al igual que en cualquier otro acto de estas características, el 'protocolo' suele ser bastante estricto también en la mesa, y la colocación de los elementos de la mesa, es milimétrica.

Los elementos básicos que se suelen disponer en la mesa son cuatro o cinco copas, plato llano y plato hondo, dos tenedores a la izquierda del plato, dos cuchillos y una cuchara a la derecha del plato.

Respecto del comportamiento de los invitados, no hay que poner en duda que saben "moverse" con soltura, pues están acostumbrados, al menos la mayoría de ellos, a este tipo de banquetes y celebraciones.

En cuanto a los elementos que componen la mesa, serán todos de la máxima calidad: mantel de hilo blanco, cubertería de plata, vajilla con el escudo Real, las copas de cristal de bohemia o algún cristal de gran calidad, etcétera.

El uso de los cubiertos, como en cualquier otra ocasión, se utilizan de fuera hacia adentro. Los más alejados del plato con los que se utilizan primero.

Los platos, se reponen a medida que son retirados de la mesa; es decir, no se deja el espacio en blanco en ningún momento.

Las pautas para hacer una pausa en la comida, o para indicar que se ha terminado de comer, son las mismas que para cualquier otro tipo de banquete.

En cuanto a los temas de conversación y el comportamiento en la mesa, siempre hay que ser prudentes, y pecar mejor por defecto que por exceso. Lo mismo, con el tratamiento a las personas que nos sirven: tratarlas con todo el respeto.

En definitiva, en una boda Real o en cualquier otro evento lo importante es hacer que la velada sea agradable para nosotros y para todas las personas que nos rodean.