Ceremonial día del entierro de Victor Manuel II.

Etiqueta que se observa en la Corte Italiana, en el ámbito diplomático.

Guía de Protocolo Diplomático.

 

Imagen Genérica Protocolo y Etiqueta protocolo.org

Funerales por Victor Manuel II, Rey de Italia.

El día del entierro, mientras este tenía lugar en Roma, todas las fortalezas italianas hicieron una salva de 101 cañonazos.

Igual saludo se hizo desde el monte Pincio, en la Corte.

Cuando el acompañamiento llegó al Panteón, se colocó el féretro en el catafalco, se rezó un solemne responso, y se disolvió el cortejo fúnebre.

A las diez de la noche se procedió a dar sepultura a Su Majestad. El féretro estaba sobre el catafalco, cubierto con un paño de terciopelo negro, en el que brillaba una inmensa Cruz, bordada de plata. Sobre el paño fúnebre estaban el casco y el collar de la Anunziata.

Seis coraceros, con uniformes de gala, estaban a los lados del túmulo, y a la izquierda, una compañía de Infantería formada en ala.

Cuatro Sacerdotes rezaban arrodillados delante del catafalco.

Entre los personajes que entraron en la Iglesia se veia al Presidente del Consejo de Ministros, al Ministro del Interior, a los Ayudantes de S.M., dos Maestros de la Casa Real, el Prefecto de Palacio y algunas Damas de la Reina.

A las diez y media, un Gentilhombre de S.M. y un Comandante de Estado Mayor subieron las gradas del túmulo para recoger el collar y el casco, que conservaron en sus manos durante toda la ceremonia.

Ocho coraceros con uniformes de diario, levantaron el paño fúnebre descubriendo el féretro, que era de plomo, forrado de terciopelo color de granate, con una cruz de plata que cubría toda la tapa, cerrada con dos candados de oro. A los pies, en una placa de plata, de forma cuadrada y de unos 15 centímetros, se grabó esta inscripción:

"Víctor Manuel II, Rey de Italia, hijo de Carlos Alberto y de María Teresa de Toscana, nació el 14 de Marzo de 1820, en Florencia, falleció en Roma el 9 de Enero de 1878".

La compañía de Infantería presentó las armas al féretro real, que fue llevado en hombros por los coraceros, dando la vuelta alrededor del templo, precedidos de algunos sacerdotes y seguidos de todos los asistentes, y lo depositaron en una mesa de hierro que habia dentro de la Capilla que está a la derecha del altar mayor (capilla que fue construida por el Pontífice Benedicto XIV, para depositar las reliquias de San Anastasio), cuya entrada es de unos 60 centímetros escasos.

El Comendador Malvano, leyó el Acta de entrega del cadáver regio, y al llegar al párrafo en donde se mencionaban las llaves de la capilla, las entregó a un Canónigo del Panteón. El Acta la firmaron el General Della Rocca, el General Cialdini, dos Caballeros de la Anunziata, el Canónigo que recibió las llaves, los Sres. Depretis y Crispi, y todos los individuos de la Casa civil y militar de S.M.

Entre tanto, los bomberos municipales tapiaron la entrada de la Capilla, terminando la triste ceremonia a las once y media de la noche.