Temas de conversación en Brasil. Conversar, cuándo y cómo. Reglas para hablar adecuadamente en todo momento
Para ellos la distancia personal apenas existe. No tratemos de alejarnos, pues se acercarán de nuevo a nosotros por su costumbre
Etiqueta empresarial: conversaciones y temas de conversación en Brasil
Las reuniones de negocios - o de otro tipo- conllevan el interactuar con otras personas. Se suele conversar con personas que nos acaban de presentar, con personas que ya conocemos de antes o bien con personas con las que coincidimos en una sala de espera o en otros lugares.
La pregunta que todos nos solemos hacer en estos momentos es: ¿de qué hablamos? Los temas de conversación son importante porque pueden ser una 'fuente' de polémicas y conflictos. Veamos algunas sugerencias sobre las conversaciones.
Reglas de etiqueta y temas de conversación apropiados en Brasil
1. Las conversaciones en las reuniones de negocios suelen empezar tratando temas triviales o de poco calado para establecer un vínculo algo más personal entre todos. Se suele hablar de gustos generales, familia y temas por el estilo.
Te puede interesar: La conversación amena. Saber conversar. Reglas de etiqueta
2. Siempre que hablen con nosotros o que nosotros hablemos con ellos, debemos mantener la mirada y no apartarla de nuestro interlocutor, lo que podría ser interpretado como un síntoma de desconfianza. Además es considerado de mala educación apartar la mirada -se puede retirar durante unos segundos, para no intimar con una mirada fija constante-.
3. La gran sociabilidad que tienen los brasileños, se nota cuando charlamos con ellos. Les gusta estar muy cerca de las personas con las que se relacionan. Para ellos la distancia personal apenas existe. No debemos tratar de alejarnos, pues se acercarán de nuevo y además puede que no les guste este 'distanciamiento'. No obstante, ellos son bastante educados y respetan las costumbres de otros países. Si se lo indicamos, tomarán nota y procurarán evitar tener tanta cercanía.
4. Las conversaciones suelen ser muy animadas, muy expresivas en cuanto a gestos y movimientos. Eso es una buena señal. Siempre que haya exclamaciones y comportamientos muy gestuales, significa que nos prestan atención y que participan de nuestra exposición.
5. En determinados momentos puede que las intervenciones suenen algo fuertes o parezcan un poco agresivas. No le demos mucha importancia pues es una manera muy propia de expresarse. Son bastante impetuosos y puede que algunas veces les domine un poco su carácter. Cuando un tema les importa y apasiona se pueden mostrar un poco impetuosos.
6. Los brasileños, como hemos dicho, son muy sociables. Les gusta participar de las conversaciones, ya sean sociales o de negocios. No debemos tratar nunca de monopolizar una conversación, no les gustará nada a nuestros interlocutores que no les dejemos participar.
7. En la medida de lo posible es un gesto de cortesía aprender algunas palabras en portugués para demostrarles nuestro interés por su idioma. Ellos apreciarán mucho ese detalle.
8. Las conversaciones personales suelen ser bastante habituales, sobre todo por su parte. Ellos suelen ser muy celosos con su vida privada, pero se suelen mostrar muy interesados por un conocimiento más profundo sobre nosotros, nuestros gustos, nuestra familia, etcétera. Por eso no debe extrañarnos si nos hacen alguna pregunta demasiado personal. Tendremos que aprender a 'esquivar' o salir del paso de forma astuta cuando se nos presenten este tipo de preguntas o situaciones.
9. Los brasileños están muy orgullosos de su país y sus costumbres, por lo que no debemos hacer ningún tipo de crítica a sus gentes o su país. Aunque conozcamos algunos problemas -como la inseguridad- es mejor no hacer referencia a cosas negativas.
10. Los mejores temas para conversar sin problemas son la gastronomía, la belleza de Brasil y sus gentes, temas culturales como viajes, libros, arte, arquitectura, deportes (sin ser demasiado apasionados), y cualquier otro tema relacionado con el mundo deportivo.
Te puede interesar: 6 temas de conversación a evitar en la mesa
11. Los temas que se deben evitar son la religión, los temas de política o corrupción, diferencias de clases o etnias, las críticas al país o a sus gentes, hablar sobre sus rivales futbolísticos y entrar en temas demasiado personales.
12. Un buen método para no meter la pata o abrir una conversación con un tema poco acertado es dejar que nuestros anfitriones sean los que empiecen la conversación con el tema que ellos crean más conveniente. De esta manera nosotros solo tenemos que seguir el hilo. Con moderación, sentido común y respeto, no tendremos ningún problema para participar en las conversaciones.