Importancia del decoro religioso.

EL respeto y el decoro religioso son importantes para el niño que se cría dentro de la religión cristiana y de cualquier otra religión.

Tratado completo de urbanidad en verso, para uso de los jóvenes. 1850.

 

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Importancia del decoro religioso.

Cuando despiertes y veas
el albor del nuevo día,
tu primer suspiro envía
a tu Dios y criador.
Dale gracias por haberte
en la noche conservado,
y adórale penetrado
de fe, esperanza y amor.

Encomiéndate a la Virgen,
que es madre amorosa y pía,
con sus devotos María
y grande su protección.
También a tu ángel custodio
pídele sea tu guía;
y en la intercesión confía
del santo que es tu patrón.

Al Señor ofrece la obra
que va a ser por tí empezada,
y de verla coronada
la gracia le pedirás;
y si algún trabajo o pena
en el decurso del día
para probarte te envía,
también se lo ofrecerás.

Sea niño tu respeto,
al templo de Dios constante,
y si pasas por delante
la cabeza inclinarás;
tomarás agua bendita
cuando entrares o salieres,
y a aquellos con quienes fueres
luego se la ofrecerás.

No hables, rías o divagues
la vista dentro del templo;
de cristiano un buen ejemplo
esmérate en presentar.
A los divinos oficios
asiste devotamente,
y con tu boca y tu mente
al Eterno has de loar.

Procurarás oír misa
cada día, si te es dable,
pues devoción tan loable
sin premio no ha de quedar;
ayúdala, porque de ángel
es el oficio que se hace,
y al Señor mucho le place
ver a un niño en el altar.

A Jesús sacramentado
que en el sagrario se encierra
con una rodilla en tierra
reverente has de adorar;
más si estuviese patente,
lo que llaman descubierto,
ambas rodillas te advierto
que entonces debes doblar.

El alma que Dios te ha dado
si no recibe alimento,
no dudes por un momento
que moribunda estará;
son el espíritu el pasto
la eucaristía y la gracia;
con su celeste eficacia
nueva vida cobrará.

Como niño religioso
al sacerdote venera
cual a un padre, y considera
que es un ministro de Dios;
salúdale reverente
su mano humilde besando,
sus doctrinas escuchando
como del Señor la voz.