La importancia de un marqués. Elegancia y saber estar de un ministro

Anécdota sobre una cena en una país africano y la situación de los invitados

 

Importancia de un marqués. Pedro Sánchez, asiste a la cena de gala ofrecida por los Reyes en honor del presidente de la República Popular de China, Xi Jinping, y su esposa, Peng Liyuan foto base Casa de Su Majestad el Rey

¿Ser marqués es mejor que ser ministro? Curiosa anécdota

En estos momentos no puedo recordar donde escuché o leí esta anécdota al Excmo. Sr. D. Sabino Fernández Campo, en la que contaba el caso de una delegación española de visita oficial a un país africano. Se celebraba una cena oficial en honor de nuestros soberanos de visita oficial por ese país, y que era ofrecida por el Jefe de Estado anfitrión.

Como se puede suponer, en estas cenas se hace una observación estricta del Protocolo al asistir personalidades de primera línea por ambas partes. Pero la cena iba deparar algunas sorpresas con las que no se contaba en un principio.

Una vez que entramos en el salón donde se encontraban colocadas todas las mesas, estuvimos observando con detalle muchos de los aspectos que componían toda aquella organización. Y en principio todo nos parecía correcto.

Pero observando, vimos que se organizó una pequeña mesa presidencial, de la que por sorpresa vimos que faltaba en la misma el "sitio" para el Ministro de Asuntos exteriores español, pero en cambio se encontraba un sitio para el Marqués de Mondejar, Jefe de la Casa de Su Majestad. Viendo el hecho, nos decidimos a tratar de "solventar" cualquier posible error que pudiera haber ocurrido.

Con la mayor discreción posible, nos dirigimos a su Jefe de Protocolo para comentarle el tema, por si había sido un descuido o un error.

La sorpresa, fue cuando el Jefe de Protocolo de aquel país indicaba a sus colegas, que estaban "cansados" de recibir Ministros, pero que nunca habían tenido entre ellos a un Marqués, y para ellos era un honor que demostraban haciéndole un "sitio" en la mesa presidencial.

Cuando se informó al Ministro de tal hecho, lo comprendió y asumió de forma educada y discreta su "nuevo" puesto en la cena de gala. Hay que comprender, que el Protocolo, como muchas otras disciplinas de la vida, tiene sus excepciones y sus propias características en determinados lugares, que no dejan de sorprender a cuantas personas se dedican a este mundillo.