El reconocimiento de las normas de protocolo es un valor en alza.
¿Qué papel juega el protocolo en nuestra sociedad? Importante en la sociedad y en el ámbito laboral.
Entrevista a Mar Casas García.
La experiencia de Mar Casas García en protocolo le ha permitido desde hace varios años organizar eventos de carácter oficial, empresarial y universitario, para empresas e instituciones de todo tipo. A partir del próximo mes de octubre, será la encargada de dirigir el Máster de Protocolo, Comunicación y Relaciones Públicas para la Empresa, que se realizará con el Sindicato de Funcionarios CSI-CSIF en ISEN Formación, en Cartagena.
Mar Casas García es licenciada en Historia del Arte por la Universidad de Murcia. Tras años ejerciendo como periodista y relaciones públicas en diversos medios de comunicación, obtiene el título de "Experto Universitario en Protocolo" por el Instituto Internacional de Protocolo en la Universidad Miguel Hernández de Elche. Posteriormente obtiene la titulación de Especialista Universitario en Protocolo y Ceremonial de Estado e Internacional, por la Universidad de Oviedo y la Escuela Diplomática de Madrid.
¿Qué papel juega el protocolo en nuestra sociedad?
Desde el punto de vista social la urbanidad ha jugado siempre un papel importante para distinguir a los seres humanos. Eso que se ha venido llamando "saber ser, saber estar" ha supuesto desde las primeras sociedades una distinción. El protocolo ha formado parte del proceso sociológico y por tanto ha evolucionado con la humanidad, y más concretamente, con la jerarquización social. Ya dijo Jacinto Benavente que "la diferencia de clase no está en ser capitalista o proletario, está en ser noble o plebeyo en el comportamiento", y esa gran verdad, que parecía haber quedado en el olvido hasta hace unos años, está nuevamente en alza.
¿Qué circunstancias han revalorizado esa asignatura tan olvidada llamada Protocolo?
El hombre ha buscado siempre reconocimiento, sentirse integrado y aceptado en la sociedad, en definitiva huir del ridículo. ¿Quién no ha tenido dudas alguna vez sobre el modo de estrechar la mano a nuestro interlocutor, y cómo hacer las presentaciones? ¿Cómo vestir correctamente en determinadas ceremonias?¿O cómo organizar una inauguración?. Hace ya algunos siglos que un diplomático, Tayllerand, dijo sabiamente que "sólo los tontos se burlan del Protocolo porque simplifica la vida".
¿Por qué el Centro de Estudios ha apostado por la organización de este Máster?
Las actividades de las empresas han crecido a un ritmo vertiginoso y la preparación empresarial se extiende cada vez a campos más diversificados, pero esta demanda convive con una laguna en materia formativa. El protocolo carece de espacio y dedicación en el sistema de enseñanza, y sin embargo, quienes llevamos años dedicados a la formación de protocolo observamos que la demanda de estos cursos es cada vez mayor. Se hacía preciso responder a esa demanda.
¿Cuál es el programa de formación que ofrece este Máster?
El programa consta de un amplio temario para dotar a los alumnos de todas las herramientas necesarias para hacer frente a las necesidades de la empresa actual en materia de Protocolo-Relaciones Públicas y Comunicación en la Empresa.
¿Por qué elegir este Máster? ¿Qué lo hace diferente?
El temario es amplísimo. Se ha dado cabida a otras disciplinas auxiliares que habitualmente no se incluyen en un mismo programa. Este Máster capacita para afrontar y planificar las diversas estrategias de protocolo, comunicación y relaciones públicas necesarias en el ámbito directivo empresarial. En otras ofertas de formación las asignaturas sólo se centran en el protocolo, sin tener en cuenta las relaciones públicas ni la gestión en la comunicación (empresarial o institucional). En esta programación el espectro de asignaturas es muy extenso y los estudiantes verán concentrado un amplio y variado temario, impartido por profesionales y expertos, que centran su actividad en el sector. En definitiva, podrán optimizar su currículum con una de las titulaciones más requeridas en el mercado laboral.
En un mundo en el que rigen las tecnologías, un ritmo de vida frenético, con poco espacio para el detalle, ¿qué importancia tiene la aplicación de una disciplina como el Protocolo?
Precisamente en un mundo tan competitivo y con un mercado laboral cada vez más exigente, las diferencias académicas no lo son todo. De poco sirve coleccionar títulos o tener un buen expediente, cuando hay otros aspectos que marcan la diferencia entre las personas. Uno de ellos es su nivel de educación. Todos preferimos tratar con gente respetuosa y, en el ámbito profesional, a quien se conduce educadamente, y guiado por principios éticos. Pero también es un valor en alza el reconocimiento de las normas de protocolo, entendido como una herramienta de trabajo. Hay que reconocer que la empresa, a través de los actos y actividades que organiza, las personas que la representan y los productos y servicios que ofrece, crea un impacto visual en los demás. Todo ello requiere el empleo unas cuidadas estrategias que hacen más eficaz y productivo el desarrollo de cualquier evento, por sencillo que este parezca.
¿Podemos decir por tanto que el Protocolo es "rentable"?
Absolutamente. Los expertos aseguran que en términos económicos es altamente productivo el buen uso de las normas de protocolo porque consigue estructurar actividades que fomentarán el negocio.