Buena educación en la mesa

Cómo deben comportarse los niños en la mesa. La hora de comer y los buenos modales de los niños cuando están en la mesa

Cartilla moderna de urbanidad para niños

 

La mesa. La mesa, buena educación. protocolo.org

Reglas de comportamiento y cortesía a seguir por los niños en la mesa

Aquella urbanidad

1. ¿Cómo se porta el niño bien educado en la mesa?

Con mucha discreción, porque allí es donde los defectos se ponen más de manifiesto y donde repugnan más a los que han de soportarlos.

2. ¿Cuáles son las principales reglas que observa el niño bien educado durante las comidas?

Primera. No ponerse a la mesa sin tener las manos escrupulosamente limpias.

Segunda. No tocar nunca la comida con los dedos.

Tercera. No hacer ruido con los labios al beber o al mascar, porque es cosa muy repugnante.

Cuarta. Guardarse mucho de dar muestras de entusiasmo cuando presentan algún manjar que mucho le gusta, o de desagrado cuando traen algo que le disgusta.

3. ¿Cómo estará seguro de no ser molesto o ridículo en la mesa?

Si es en casa o en el colegio, portándose en todo según le enseñen los padres o los maestros.

4. ¿Y cuando se halle entre forasteros?

Ordinariamente observando las mismas reglas que en su casa o en el colegio; en los casos imprevistos tomando por guía el ejemplo de las personas de más respeto y de mayor educación que estén en la mesa con él; conviene sin embargo hacerlo sin llamar la atención y sin ser notado.

5. Tratándose de comida y bebida ¿qué defectos evita más particularmente el niño bien educado?

La glotonería y la intemperancia, propias de las almas envilecidas, que debilitan la voluntad, esclavizan el alma y son, además, enemigas de la salud y de la buena conciencia.

6. ¿Qué otros defectos debe evitar el niño bien educado durante las comidas?

Evitará oler los alimentos y, una vez probados, hablar de su mal gusto o defectuosa preparación. Tampoco hará pregunta sobre la comida a las personas que le sirven.

Cuentan de un rey de Aragón que visitando la casa solariega de un noble, magníficamente remozada y ampliada; llegaron a la cocina y les sorprendió tanto por lo pequeña que le dijo a su monarca:

- Una cosa me maravilla, y es ver cocina tan pequeña en casa tan grande y tan hermosa.

- No lo extrañe Vuestra Majestad, respondió el noble; entienda al contrario que solo por tener la cocina tan pequeña he podido levantar y sostener casa tan grande.

Los buenos modales en la mesa de los niños bien educados

La mesa. La mesa, buena educación. protocolo.org

Los malos modales en la mesa de los niños mal educados

La mesa. La mesa, mala educación. protocolo.org