Rescatemos los valores

Con razón las personas ubican en las encuestas, que la pérdida de los valores está entre las primeras causas de la crisis que vive nuestra sociedad

Diario El Nuevo Día

 

Rescatar valores. Familia en un banco de la calle foto base doanme - Pixabay

El respeto y la consideración: rescatar los valores

A veces buscamos a Dios por los rincones, a veces buscamos complejas respuestas a preguntas como ¿Por qué ya no hay respeto ni consideración entre nosotros como vecinos? Tal vez una simple respuesta y orientación nos la daría Manuel Antonio Carreño Muñoz, quien nació en Caracas en el año 1812; fue músico, pedagogo y diplomático venezolano. Su texto clásico de etiqueta y buenas maneras recorrió Latinoamérica por entregas en el año 1853.

El manual de Carreño -como se conoce popularmente a este libro- es considerado como la guía básica en cuanto a las buenas costumbres; tal ha sido su impacto que la mención de su título ha variado en expresiones como Manual de Carreño , éste señala la codificación por escrito de lo que se considera como adecuado en urbanidad y trato entre las personas para cierta actividad; pero hay quienes consideran que las nuevas tecnologías, nuevos hábitos de comida, de vestir, nuevos horarios para levantarse y acostarse y nuevas metodologías de trabajo, han devenido en fomentar un progresivo olvido de estas normas de convivencia, quitándoles a las generaciones presentes y futuras una herramienta vital para no perder el rumbo; tristemente todos estos cambios, se han llevado consigo lo que antaño era llamado buenos modales, moral, protocolo o buenas costumbres.

Hoy en día se dice "buenos días" y generalmente nadie responde, no hay la cortesía de "primero usted" en las entradas o salidas, una anciana recorre kilómetros parada en algún bus y los jóvenes se mantienen indiferentes, cediendo el puesto sólo a las chicas con buenas figuras.

Basta ir detrás de algún carro para ver como se lanza basura por las ventanas, algo similar sucede en los espacios públicos, al punto que en una ocasión observé que un niño tiraba la basura al suelo sin que los padres lo corrigieran, traté de advertirle el asunto de manera discreta, señalándoles que algo se le había caído al niño y la respuesta fue que no se le cayó, él lo botó. Esto me permitió entender que muchas personas asumen esto como una práctica correcta.

Con razón las personas ubican en las encuestas, que la pérdida de los valores está entre las primeras causas de la crisis que vive nuestra sociedad; cuestión que pareciera que no han detectado los dirigentes que hoy gobiernan, al punto que el presidente de la república califica de manera natural de "pendejo" al presidente de la O.E.A.; también durante la campaña electoral presidencial utilizaron como sonido de agitación política, algo así como palo, palo por ese cu..., dirigido a sus adversarios políticos (más de 8 millones de votos entre oposición y abstención) además del irrespeto a los votantes que estando con él y su manera de gobernar, no comparten la división, enfrentamientos o discriminación hacia otros ciudadanos.

En la oposición también existen extremistas que comparten esa mala práctica y ejemplo, ahora tal vez sea más sencillo comprender cómo somos y lógicamente nuestra clase política no será distinta, sólo en la educación de la casa, del hogar, estará la salvación de esta maltrecha sociedad que compartimos.