¿Es correcto abrir la puerta del coche a otra persona?
La cortesía del conductor conlleva tener ciertas atenciones con sus pasajeros, con independencia de la edad o el género
Gestos de cortesía: abrir la puerta del coche para que suba o baje, una persona importante, una mujer o una persona de edad avanzada
Si, por supuesto. Una cosa es que apenas se haga en la actualidad, sobre todo cuando se trata de una gran ciudad, donde se para el coche en sitios poco adecuados e incluso prohibidos para estacionar, pero otra cosa es que no sea una muestra de cortesía que debamos tener siempre que sea posible.
Las prisas con las que se suele vivir, sobre todo en las grandes ciudades, hacen que los gestos de cortesía sean cada vez menos habituales, no solo cuando nos referimos al automóvil, sino en otros muchos ámbitos y contextos.
Si hemos parado en un sitio que podemos bajarnos del coche sin peligro, es muy de agradecer que abramos la puerta a esa señora o persona mayor facilitándole la entrada/salida en el vehículo. E incluso, podemos echarle una mano para ayudarle a acomodarse en el coche.
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Por razones de seguridad, debemos abrir la puerta del lado de la acera y no la puerta del lado de la calzada, salvo que estemos en un lugar por donde no pasan otros automóviles por ninguno de los dos lados. Por ejemplo, si entramos con el vehículo en una zona peatonal.
Si tenemos que pasar al otro lado del vehículo, por la razón que sea, debemos hacerlo por su parte trasera, mejor que por la parte delantera.
Las personas muy mayores, al igual que se hace con los niños, no es conveniente que se les deje viajar en el asiento del al lado del conductor. Es mejor que viajen en los asientos de atrás. Y mejor, acompañados. Si no hay acompañantes, entonces hay que valorar la conveniencia de tenerlo al lado del conductor, para ir 'mejor vigilado'.
Los gestos de cortesía en el automóvil hay que tenerlos con todas las personas que viajan con nosotros, aunque no sean personas muy mayores o mujeres. La cortesía del anfitrión -en este caso, conductor- debe ser la misma para todo el mundo. Recibir un trato amable es una 'obligación' para un conductor bien educado.