Los niños y los saludos en la calle. Reglas de cortesía y etiqueta para saludar en la calle

Cuando los niños salen a la calle es normal encontrar a otros amigos, a vecinos, a compañeros de clase... y a los padres de estos niños

 

Saludos niños calle. Dos niños se saludan con el codo durante la pandemia protocolo.org - FP Pro

¿Cómo saludar en la calle a otras personas? Niños bien educados

Es bastante habitual encontrarse por la calle con amigos, vecinos, familiares, compañeros de clase, etcétera. Lo correcto y más educado es hacer un saludo, aunque solo sea gestual y no verbal.

Si vemos un amigo a lo lejos o que camina por la otra acera nada de saludar a voces, o dando gritos. Se puede hacer un simple gesto sin tener que decir ni una sola palabra. Nada de chillar "Mira, mira... Pablito y su madre" o cosas por el estilo. Hay que esperar a estar cerca o bien a poder cruzar -si está al otro lado de la carretera- para saludar a ese amiguito o amiguita.

Si los padres no se conocen, aunque los niños sean pequeños, deben hacer de introductores y presentadores. Mira mamá o papá: esta es la mamá o el papá de Pablito. Si el niño no lo hace, los propios padres pueden ser los encargados de autopresentarse.

Los niños también deben saludar a los mayores antes de ponerse a hablar entre ellos.

Si no podemos cruzar porque tenemos prisa o estamos en una avenida muy amplia, podemos saludar con un gesto, pero nunca dando voces o hablando a gritos de un lado a otro de la acera.

Si el amiguito al que vemos, va en coche, no debemos bajarnos a la carretera, simplemente le saludamos con la mano. Si eres tú el que vas en coche haz lo mismo, pero no hagas que el adulto que conduzca tenga que parar en un sitio que no pueda estacionar, o interrumpa la circulación normal de esa calle por estar parado mucho tiempo.

Si estamos dentro de un comercio, podemos salir un momento para saludar a ese amigo, vecino o familiar. Avisando a quien esté a nuestro cargo que salimos un momento. Si no lo hacemos, le podemos un gran susto cuando vea que hemos 'desaparecido'.

Si estamos en una ventana, balcón, etcétera, además de tener cuidado y no asomarse demasiado, se hace un gesto con la mano, pero no se grita.