Comportamiento en la mesa. Consejos de urbanidad. I

La mesa es el mejor escenario para demostrar la buena educación de una persona y poner en práctica todo lo que hemos aprendido

Consejos morales a la niñez, y reglas de urbanidad. 1846

 

En la mesa. Imgen del libro 'Verses for Grannie. Suggested by the children ... Illustrated by D. A. H. Drew'. The British Library. The British Library

Guardar la compostura en la mesa

Aquella urbanidad

No ofrezcas, si le has usado,
a ninguno tu cubierto,
ni tomes con él manjares
de la fuente que esté en medio;
tómalos con otro limpio
que así conviene al aseo.

Comida que estés probando
ni vaso en que estés bebiendo,
a nadie ofrecerle debes
si ser fino es tu deseo.

No debes tocar el plato,
hasta que te invite el dueño,
y entonces, con discreción
debes procurar hacerlo.

El amo de casa debe,
con los modales más bellos,
hacer que sus convidados
coman y beban, no siendo
ni por demás importuno,
ni por demás desatento,
ni alabar plato ninguno,
por más que sea muy bueno.

Si algún manjar te disgusta,
abstente, sí, de comerlo
pero no lo manifiestes,
porque es ademán grosero.

No pidas de beber, antes
que lo hagan otros sujetos,
ni mucho tu vaso llenes,
ni aprisa bebas, teniendo
bocado alguno en la boca,
limpia tus labios y dedos
solo con la servilleta,
haciéndolo con aquellos
siempre que bebas; mas nunca
con el mantel has de hacerlo.

No te rasques la cabeza
ni escupas; todo lo menos
que puedas, suénate y tose;
mas cuando no haya remedio
cuida bien que a los manteles
no se llegue tu pañuelo.

No disputes en la mesa,
antes bien muestra contento,
no hables con la boca llena,
ni digas cosas que tedio
o asco ocasionen, en todo
curioso y prudente siendo.