Protocolo y Etiqueta - Volver a la Portada

|

Reglas de cortesía

|

P�gina 31

Reglas de cortesía

Reglas de cortesía

Las reglas de cortesía son reglas de conducta y buen comportamiento. Son una muestra de respeto y consideración que se tienen hacia otras personas

Todos los art�culos de Reglas de cortesía

Inicio Anterior P�gina 31/33 Siguiente Final

Excesos en las diversiones corporales. II.
Aquella urbanidad
6353
Los placeres que pueden disfrutarse en los bosques, parece que fueron desde el siglo V al XV las diversiones predilectas de las personas de elevado rango y de muchas riquezas.
Excesos en las diversiones corporales. III.
Aquella urbanidad
6354
Las diversiones corpóreas que prevalecieron en los pasados siglos nos dan por resultado conquistas, agresiones, saqueos y supercherías proclamadas como acciones honoríficas.
Exceso en los juegos de azar durante los pasados siglos.
Aquella urbanidad
6359
Los germanos se entregaban a los juegos de azar con tanto empeño y ardor, que cuando habían perdido el dinero se jugaban su misma persona, o sea, su libertad.
Exceso en la corrupción de las costumbres en los pasados siglos. I.
Aquella urbanidad
6361
Dejamos sentado que antiguamente era grande el exceso en el comer y en el beber, lo cual está probado con buenos y numerosos documentos.
Exceso en la corrupción de las costumbres en los pasados siglos. II.
Aquella urbanidad
6362
Los peregrinos y cruzados introdujeron en Europa los vicios de Asia, y llevaron al Asia los vicios de Europa.
Exceso en la corrupción de las costumbres en los pasados siglos. III.
Aquella urbanidad
6363
Los jueces reales llegaban a tal exceso de venalidad en Inglaterra, que en 1229 fueron acusados criminalmente y declarados culpables y condenados a multas proporcionadas a sus delitos.
Exceso en la corrupción de las costumbres en los pasados siglos. IV.
Aquella urbanidad
6364
A los numerosos juramentos falsos abrió mucho campo la ignorancia, porque como casi nadie sabia escribir y no pudiendo consignárselos actos y documentos escritos, fue preciso confiar enteramente en la prueba testimonial y abusaron de ella.
Exceso de la infelicidad social durante los pasados siglos. I.
Aquella urbanidad
6369
Cuando nacen las sociedades sin que aun haya nacido el gobierno, el individuo que no puede alcanzar por sí mismo una venganza cumplida, empeña a sus amigos a que se le unan.
Exceso de la infelicidad social durante los pasados siglos. II.
Aquella urbanidad
6370
Los partidos políticos se enconaron con los partidos religiosos que comienzan en el siglo XII.
Exceso de la infelicidad social durante los pasados siglos. III.
Aquella urbanidad
6371
Los asesinos que osaban atacar al rey, a cardenales, a obispos, a condes acompañados de mucha gente, y asaltar ciudades poderosas, debían ser formidables para los viandantes particulares.
Ojeada histórica a la civilidad.
Aquella urbanidad
6333
De los bárbaros a la civilización. El triunfo de los buenos modales y la racionalidad.
Los chistes en sociedad. II.
Aquella urbanidad
6323
Se provoca la risa hablando de objetos bajos y plebeyos en tono grandioso y elevado con el cual reciben aquellos un aire cómico y gracioso.
Los chistes en sociedad. I.
Aquella urbanidad
6322
La risa parece el producto de las dos sensaciones unidas, sorpresa y placer, movidas por un ligero contraste o por una finísima analogía.
Sátira cortés en sociedad. I.
Aquella urbanidad
6320
La sátira debe ser considerada como una multa censoria que sirve para corregir aquellos defectos que sin dejar de ser molestos y aun nocivos a la sociedad, no se encuentran en los códigos criminales.
Sátira cortés en sociedad. II.
Aquella urbanidad
6321
Es menester distinguir la maledicencia que descubre las inofensivas debilidades por el solo gusto de denigrar, de la otra que descubre delitos verdaderos que pueden ser dañosos al prójimo.
Las disputas. I.
Aquella urbanidad
6298
Discutir es alegar las razones y los argumentos en que se apoyan dos opiniones opuestas sin consideración a las personas que las proponen.
Las disputas. II.
Aquella urbanidad
6299
Las personalidades suelen agriar los ánimos en las disputas, y por lo común apelan a ellas los que más desprovistos están de razones.
Defectos en la reuniones y conversaciones. I.
Aquella urbanidad
6262
Cuando muchos hablan a un tiempo, parece que oye uno a las ranas que se empeñan a porfía en sobrepujarse unas a otras y procurarse la gloria de ensordecer a cuantos las oyen.
Defectos en la reuniones y conversaciones. II.
Aquella urbanidad
6263
La alegría moderada en las conversaciones pasa fácilmente de uno a otro ánimo y es acogida con favor por todos.
Defectos en la reuniones y conversaciones. III.
Aquella urbanidad
6264
Los charlatanes se hacen callar no dando pávulo a sus palabras, del mismo modo que un tocador de violín para a los bailarines cesando de tocar.
Defectos en la reuniones y conversaciones. IV.
Aquella urbanidad
6265
Si a la locuacidad se une el egoísmo, esto es, si siempre hablamos de nosotros mismos, de nuestros gustos, de nuestras cosas, y de cuanto nos pertenece, es positivo que fastidiaremos de una manera insoportable a cuantos nos oigan.
Defectos en la reuniones y conversaciones. V.
Aquella urbanidad
6266
Querer que nuestra conducta merezca la aprobación de todos, es pretender que los mismos manjares agraden también a todos.
Defectos en la reuniones y conversaciones. VI.
Aquella urbanidad
6267
La vanidad contribuye a hacer más activo el estímulo de la curiosidad, porque hay una satisfacción en poder decir, yo lo sé, yo lo he visto.
La Cortesanía en general. I.
Aquella urbanidad
6134
Actos inurbanos o molestos a los presentes.
La Cortesanía en general. II.
Aquella urbanidad
6135
Actos inurbanos o molestos a los presentes.
Actos que molestan a los demás. I.
Aquella urbanidad
6137
La cortesía prohibe hacer revivir o echar en cara a otro los vicios que un largo arrepentimiento ha borrado.

Inicio Anterior P�gina 31/33 Siguiente Final

Protocolo y Etiqueta es un portal de Cronis OnLine.

Copyright © 1995-2023

Las opiniones expresadas por los colaboradores son independientes y no son compartidas necesariamente por protocolo.org

Generado con contentG

Contactar con protocolo.org

Teléfono 902 050 373
Contacto consultas@protocolo.org

Algunos contenidos de este portal web están bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.

Politica privacidad

Colabora con Protocolo.org

Cartas al editor