Tiempo de ocio en Rusia. Vida social en los negocios. Actos y eventos
Hay que cumplir con otro tipo de compromisos como comidas de negocio, desayunos de trabajo, fiestas u homenajes
Etiqueta social en Rusia. Buenos modales en el día a día
Las reuniones de negocios, son solo una parte del 'trabajo' que se realiza en las instalaciones de una empresa. Hacer en negocios, en general, tiene además de la parte profesional una parte social que tendremos que saber cumplir con soltura. Es bastante probable tener que asistir a alguna comida, a alguna fiesta o celebración, a un desayuno de trabajo, etcétera, etcétera.
Conocer las reglas de cortesía y etiqueta social nos puede ayudar a cumplir todo tipo de compromisos, tanto profesionales como sociales, con cierta soltura y seguridad. Saber estar en cada momento, nos hacer ganar muchos 'puntos' delante de nuestros anfitriones.
Reglas de etiqueta social y cortesía en Rusia
1. En torno a la mesa. Las comidas de negocios empiezan a tomar gran auge en ese país. Más que un almuerzo de trabajo, son mucho más habituales las cenas de negocios, por las posibilidades que ofrecen de continuar tomando una copa y seguir charlando. Hay que elegir un buen restaurante y si tiene comedor privado mejor. Si no tiene un reservado, habrá que tratar de elegir un establecimiento tranquilo.
Lo que apenas se estila en Rusia son los desayunos de trabajo, aunque poco a poco empiezan a tener cierta importancia y no son tan escasos.
No se debe empezar a comer hasta que lo hacen nuestros anfitriones o hasta que no se propone un brindis en su honor.
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El uso de los cubiertos es al estilo "continental" con el tenedor en la mano izquierda y el cuchillo en la derecha; no se intercambian nunca. Las manos se mantienen siempre sobre la mesa. No es correcto 'esconder' las manos debajo de la mesa o sobre nuestro regazo.
2. Dadas las condiciones climatológicas del país, los rusos no son personas acostumbradas a las actividades al aire libre -aunque si tienen algunas-. Los horarios suelen ser mucho más 'tempraneros' que los de cualquier país latino. Una cena es fácil que comience sobre las 6 de la tarde. Si el sitio al que nos llevan es muy elegante, es una buena señal. Eso nos puede indicar que están dispuestos a cerrar un acuerdo.
3. Los acompañantes no suelen ser invitados si la comida -almuerzo o cena- es de trabajo. En cambio, a otros actos sociales si pueden ser invitados. Por ejemplo, cuando nos invitan a casa de alguno de nuestros colegas-anfitriones. En estos casos, no debemos olvidarnos de llevar un detalle si vamos a una casa particular. En el caso de invitaciones 'fuera de casa', no tenemos el compromiso de llevar nada -salvo excepciones, por ejemplo, si nos invitan a un cumpleaños-.
4. La distribución de los asientos suele ser hecha por los propios anfitriones. Los sitios centrales son reservados para los directivos o ejecutivos de mayor nivel. A diferencia de otras formas de ubicar a los invitados en la mesa, el sitio de honor de la derecha de los anfitriones, es habitual que nos sienten a nosotros y a nuestros acompañantes enfrentados a ellos -estilo francés-.
En un país donde empiezan a despuntar los avances en muchas parcelas de la vida, todavía está mal visto que una mujer coma sola en un restaurante. No obstante, hay que indicar una gran diferencia de costumbres entre la capital Moscú, y otras ciudades de Rusia. Gran parte de la capital se ha occidentalizado muy rápidamente. Los núcleos de población más pequeños son más tradicionales.
5. Bebida y sus costumbres. Los rusos son muy dados a tomar bebidas con alcohol, lo que puede suponer un problema si no bebemos. Debemos procurar no rechazar ninguna bebida que nos ofrezcan; si lo hacemos debemos tener una buena excusa para evitar 'molestar' a nuestros anfitriones. Si tenemos que beber por obligación aunque no sea de nuestro agrado, hay que poner buena cara y no demostrar disgusto o contrariedad. Una buena sonrisa indica que aceptamos un brindis, que estamos contentos por la invitación y que respetamos sus costumbres y a las personas que nos proponen el brindis. Cuidado con no pasarse con la bebida; ellos pueden aprovechar un momento nuestro de debilidad para obtener alguna contrapartida en sus negociaciones. No olvidemos que estamos en una "reunión de negocios" aunque no lo parezca.
6. Comer en Rusia. A parte de ser grandes bebedores, también suelen disfrutar mucho comiendo y puede que nos quieran hacer repetir de cada plato. Si no queremos que nos hagan repetir de un plato, lo mejor es que dejemos algo de comida en el plato para indicar que ya estamos llenos y que no deseamos comer más de ese plato. Si aún así, no lo conseguimos, tendremos que utilizar todo nuestro poder de persuasión para tratar de convencerles.
7. Agua embotellada. Es recomendable solicitar en el restaurante, en la oficina, en el hotel o en cualquier otro lugar agua embotellada. El agua que se conoce como del grifo puede no ser lo más conveniente al no estar en sus mejores condiciones (poco o mal purifica- desinfectada en algunos casos).
8. Tabaco en muchas reuniones. Aunque cada vez se restringe más el uso del tabaco, debemos estar preparados para soportar el humo del tabaco durante toda la comida, si nuestros colegas-anfitriones son fumadores. Fumar durante la comida no es algo extraño para ellos -al igual que no lo era en muchos países del mundo hasta hace muy poco tiempo-. Dentro de lo razonable podemos "negociar" el uso del tabaco en la mesa, aunque sino nos molesta demasiado lo mejor es dejarles ser ellos mismos.
9. Pagar la cuenta. La persona que invita es la que paga la cuenta. No debemos tratar de pagarla ni tan siquiera de hacer el gesto de abonar la cuenta. Puede resultar una gran ofensa para ellos. Y no digamos nada si encima es una mujer la que trata de tener este gesto.
Aunque suene a temeridad, no es demasiado correcto revisar la cuenta delante de los camareros ya que es síntoma de desconfianza y no les suele gustar demasiado.
10. Para llamar al camarero tratemos de hacerlo mediante un simple contacto visual y un leve movimiento de la cabeza. Pero no se debe hacer con la mano, mediante señas o llamándole por su nombre.
11. Propina. Muchos restaurantes empiezan a tomar costumbres europeas e incluyen en su cuenta un 10% del importe del total en concepto de propina. Si no la incluyen en la cuenta, el personal que les ha atendido agradecerá cualquier importe (prudente y apropiado) que quieran dejar como propina.
12. Comida rápida. Salvo las cadenas internacionales de comida, hay que ser muy cautelosos con los puestos callejeros de comida, comida que nos ofrezcan en establecimientos poco presentables, etcétera.
13. Invitaciones a casa. Que un ruso nos invite a su casa es todo un honor. Debemos corresponder a este honor con un regalo para los anfitriones y para los pequeños, si los hay en la casa. En el capítulo sobre regalos en Rusia, puede consultar cuales pueden ser los regalos más apropiados.
Una invitación de un ruso, suele conllevar pasar toda la velada con ellos, hasta pernoctar en su casa o estar con ellos hasta altas horas de la madrugada. No obstante si optamos por decirles que nos regimos por el horario europeo, aceptarán de buen grado que nos retiremos a una hora prudencial.
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Con el clima tan 'duro' que tienen durante gran parte del año, es probable que tengamos unas zapatillas esperándonos a la puerta de su casa, para que nos quitemos los zapatos o botas al entrar.
14. Si hay una fiesta o cualquier otro evento social al que estemos invitados debemos consultar la idoneidad de vestir o no de etiqueta. Suelen ser bastante ceremoniosos y les gusta todo el lujo posible para sus fiestas. Tampoco debe extrañarnos si nos invitan de forma personal, sin mediar una invitación impresa de por medio.