15 reglas de etiqueta en la mesa para estas navidades

La fiestas navideñas son uno de los mejores momentos para encontrarse con amigos y familiares que apenas se ven durante el resto del año

 

Mesa. Mesa de Navidad. Patrick Denker

Mesa de Navidad. No olvidemos los buenos modales

La Navidad es un tiempo de fiesta y celebración perfecto para reunir a nuestros amigos y familiares en casa. Una buena mesa es el lugar ideal para compartir momentos y experiencias únicas e irrepetibles. Es el punto de encuentro donde poder compartir una buena comida y una estupenda conversación. Pero cuidado, sin dejar a un lado los buenos modales y el saber estar. Confianza no quiere decir mala educación.

Menos protocolo, más educación en la mesa

La confianza que ofrece compartir una mesa con amigos y familiares no tiene porqué ser una excusa para tolerar comportamientos no apropiados o poco educados. Por esta razón, no está de más recordar algunas de las reglas o pautas de comportamiento que hay que tener en cuenta en la mesa, siempre, aunque estemos acompañados de personas de confianza.

El uso de los cubiertos en la mesa de Navidad

La regla de oro: "los cubiertos se utilizan de fuera hacia adentro, primero usamos los más alejados del plato y siguiendo este mismo orden hasta utilizarlos todos". Por muchos cubiertos que haya a cada lado de nuestro plato -algo muy típico en Navidad es hacer un amplio despliegue de elementos de la cubertería- esta regla es universal.

15 reglas de oro a tener en cuenta en la mesa de Navidad

1. Desdoblar la servilleta

La servilleta solo la debemos colocar en nuestro regazo cuando se va a empezar a comer. No hay que hacerlo antes, pues no es nada elegante ni correcto estar con la servilleta en nuestro regazo cuando no hay comida sobre la mesa.

Mesa Navidad. Servilletas mesa Navidad Deco Holic Interior Design

2. Tocar los cubiertos antes de comer

Los cubiertos solo se utilizan cuando nos sirvan algo de comida en el plato. Un cubierto es un objeto diseñado para tomar ciertos alimentos, no para jugar, incordiar o utilizarlos para otras funciones distintas a las suyas -hay quien los utiliza como destornillador, como mondadientes, etcétera-. Por muy 'extraño' que nos parezca el cubierto no es cuestión de manosearlo. No se 'mira' con las manos como diría mi abuela.

3. Platillo del pan. No se lo quite a su 'vecino' de mesa

No hay que olvidar que la pieza de pan siempre es la que está en lado izquierdo. No le quitemos el pan a nuestro compañero de mesa que se sienta a nuestra derecha. Hablando del pan, no se corta con el cuchillo. El pan se trocea "pellizcando" ligeramente la pieza de pan.

4. Cómo tomar las sopas y cremas

Una sopa, crema o similar se toma con cuchara, pero no se inclina el plato para acabar su contenido. Hay que recordar que el plato, mejor, no se toca. Otra cuestión importante; si está muy caliente no se sopla para enfriarlo, debemos dejar que enfríe su contenido de forma natural.

5. Compartir comida con otros comensales

Salvo en ambientes muy familiares o de mucha confianza, no se intercambia comida entre los platos, ni tampoco debemos "meter" nuestro cubierto en otro plato que no sea el nuestro. Los cubiertos no deben salir de nuestro plato. Y los cubiertos de los otros comensales, tampoco deberían entrar en nuestro plato.

Mesa Navidad. Familiares celebran la Navidad. Abigail Batchelder

6. Servir la bebida. ¿Cuánta cantidad hay que servir?

No se deben llenar las copas hasta los bordes -se llenan sobre un tercio de su capacidad cuando es un vino y algo más de la mitad de la copa si es agua, un zumo o un refresco-. Tampoco debemos beber el contenido de una copa de un solo trago; hay que beber a pequeños sorbos. Si es un brindis y se sirve poca cantidad, si es correcto tomarlo de un solo trago.

7. Cuándo podemos levantarnos de la mesa

Ni pequeños ni mayores se deben levantar de la mesa hasta que no haya finalizado el almuerzo o la cena. Solo por alguna razón importante se puede uno ausentar de la mesa antes de terminar la comisa. Se deben pedir excusas y se solicita el permiso para poder levantarse de la mesa.

8. Servir los alimentos a los comensales

Aunque depende mucho del sitio que haya para poder pasar entre los invitados, por regla general, se sirve por la izquierda y se retira por la derecha. La bebida se sirve por la derecha.

Servir mesa. Servir a los comensales Skinny Mom

9. Situar a los invitados en la mesa de Navidad

En una mesa familiar el criterio de "ordenación" más utilizado es el de la edad. Hay que olvidarse de todo tipo de jerarquías que en casa no son "efectivas". En una mesa de Navidad en casa un ministro, un director de una compañía, un alcalde, una directora general, etcétera, son simplemente Carlos, Francisco, Jesús, Patricia... No hay una precedencia "oficial" sino familiar.

10. Ritmo de la comida navideña

Estos días de fiesta en la mesa es muy habitual intercambiar todo tipo de anécdotas, experiencias y vivencias con personas que no se ven durante el resto del año. Esto no debe alterar el ritmo de la comida. Si hay muchas "historias" que contar se pueden dejar para la sobremesa. Hay que adaptarse al ritmo general de la comida.

11. Ayudar a los anfitriones en lo posible

Si la reunión convoca a muchos familiares y amigos, siempre habrá un "alma caritativa" que se ofrezca a los anfitriones para echarles una mano. Hay que dejarse de tópicos y machismos y no dejar todo el trabajo a las mujeres de la casa. Incluso, sería un bonito detalle darles un descanso y que los hombres de la casa se ocupasen de todo, o de casi todo.

Brindis. Brindis de Navidad. Business Insider - businessinsider.com

12. La hora de los brindis ¿cómo hacer el brindis?

Es posible hacer uno o varios brindis, dependiendo de la costumbre de cada familia, tanto al principio como al final e, incluso, a lo largo de toda la comida. Tampoco hay que ser demasiado pesado y proponer muchos brindis. Cuidado con los motivos del brindis, no vayan a ser ofensivos o molestos para algunos comensales. Entre la broma y la ofensa algunas veces hay una línea muy delgada.

13. Temas de conversación para la mesa de Navidad

Confianza, familiaridad... no son sinónimos de todo vale. Es un día para disfrutar y no para polemizar -el alcohol puede ser un aliado estupendo para perder los nervios o decir algo inconveniente-. Además de los temas típicos que pueden causar desavenencias como algunos deportes, la política, la religión... tampoco deben salir a "escena" temas familiares como herencias, cuidado de los mayores, favores denegados, etcétera.

14. Cuidado con los niños, hay que tenerlo bien controlados

Si hay niños pequeños, mejor, sentarles al lado de sus padres -aunque haya que variar el orden de situación de los invitados en la mesa-. Es la mejor forma de "controlarlos" y de atender cualquier necesidad que tengan -cortarles un trozo de carne, darles algo a la boca, evitar que se levanten de la mesa, etcétera-.

Niños en Navidad. Los niños en la mesa de Navidad bien controlados por los mayores. Niño en Navidad StockSnap - Pixabay

14. El momento de abrir los regalos de Navidad

Si hay regalos mejor al terminar de comer. Es un auténtico caos dejar, aunque sea por evitar que den la lata los más pequeños, dejar abrir los regalos antes de la comida -bien sea un almuerzo de Navidad o una cena de Nochebuena-. Además de evitar un gran revuelo, es una lección de paciencia y respeto a los menores.

15. Fin de la comida navideña: igual que al inicio

Tanto el inicio de una comida como el final lo marcan los anfitriones o los que hacen sus veces. Es decir, hasta que no comienzan a comer los anfitriones o los mayores de la casa que presiden la mesa, por ejemplo los abuelos, no se empieza a comer. Lo mismo al terminar de comer. Si alguien quiere levantarse de la mesa, antes debe pedir el correspondiente permiso.

Resumiendo, esta no es una lista exhaustiva y seguro que a usted se le ocurren otras cuantas cosas que deberíamos tener en cuenta todo el mundo en una mesa de Navidad. Como decimos siempre, con un poco de prudencia y de sentido común todo irá sobre ruedas. Lo importante es disfrutar de unas fechas tan entrañables y en buena compañía. Cuidado con los excesos a la hora de comer y de beber. ¡Felices Fiestas!