Del modo de conducirnos en la escuela
A nuestros maestros, como a segundos padres, les debemos afecto, obediencia y respeto
El comportamiento en el colegio y en la escuela
Aquella urbanidad
1. A nuestros maestros, como a segundos padres, les debemos afecto, obediencia y respeto.
2. Debemos observar una conducta intachable, para ser merecedores del aprecio y admiración de todos los que forman la familia escolar.
3. Jamás debemos molestarnos por las correcciones y amonestaciones de los maestros. Debemos pensar que ellos lo hacen únicamente por nuestro propio bien y por el cariño que nos tienen.
4. Seamos fieles cumplidores de todos nuestros deberes y obligaciones: seamos alumnos modelos en aprovechamiento y conducta.
5. Cuando el maestro, por alguna razón se ausenta de la clase, nuestro comportamiento debe ser igual o mejor. Así demostraremos lealtad y gratitud.
6. Tratemos a nuestros compañeros con verdadera amistad, bondad y consideración. Los afectos más puros y la amistad más sincera nacen durante la vida escolar.